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Nicole es una joven estadounidense de 19 años de edad con una peculiar adicción: comer desodorante. Su extraña costumbre empezó hace dos años y desde entonces ha ingerido 360 barras de dicho producto de higiene personal.
La conducta de Nicole fue revelada en el programa My Strange Addiction, donde explica que su vida “gira en torno a comer desodorante. Cuando me despierto por la mañana, quiero desodorante. Es muy suave. Siento cómo se derrite en mi boca. Tiene un sabor único”.
La joven no solo come desodorante en barra sino también en spray porque, según dijo, no dejan residuos en la boca.
Este producto contiene aluminio, sustancia que es tóxica para el ser humano. Nicole ha asistido a consultas médicas donde le indicaron que la mayor preocupación es a nivel cerebral, pues la joven ya presenta problemas de memoria.
