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La policía de Rusia anunció hoy la liberación de todos los opositores detenidos el sábado durante la jornada nacional de protestas, que coincidió con el 65 cumpleaños del jefe del Kremlin, Vladimir Putin .

Fuentes policiales estimaron en 136 los detenidos, la mitad de los cuales fueron acusados de alterar el orden público y deberán ir a juicio en los próximos días.

El mayor número de detenidos se produjo en la ciudad de Yaroslavl, donde ejercía de diputado el asesinado líder opositor Boris Nemtsov, con 56, mientras en San Petersburgo, epicentro de las protestas, fueron enviadas a comisaría 38 personas.

Según fuentes opositoras, en total fueron detenidas casi 300 personas, de ellas 68 sólo en la antigua capital zarista, donde se produjeron los incidentes más violentos de la jornada.

El líder opositor, Alexéi Navalni, no pudo acudir a la protesta porque está cumpliendo un arresto de 20 días, lo que redujo en gran medida la capacidad de convocatoria de la oposición extraparlamentaria.

Con todo, se mostró satisfecho con la marcha de la jornada, en la que hubo 36 actos de protesta legales y 26 no autorizados, y adelantó que hará todo lo posible para ofrecer asistencia jurídica a los detenidos.

Las anteriores dos protestas nacionales convocadas este año por Navalni congregaron a decenas de miles de personas y acabaron con la detención de en torno a un millar de manifestantes, casi todos en Moscú y San Petersburgo.

En esta ocasión, el objetivo no era denunciar la corrupción en la administración pública, sino exigir la participación de Navalni en las elecciones presidenciales de marzo de 2018, en las que Vladimir Putin buscará la reelección .

El Kremlin y a la sazón la Comisión Electoral se escudan en que Navalni tiene antecedentes penales para inhabilitarle como candidato a la presidencia, pero él insiste en proseguir su campaña, para lo que cuenta con el respaldo de Occidente.

Las protestas no autorizadas no sólo fueron criticadas por las autoridades, sino también por el partido liberal Yábloko, que acusó a Navalni de provocar a las fuerzas de seguridad para ganar votos.

Navalni, el único político que puede hacer sombra a Vladimir Putin, acusa al Kremlin de boicotear su campaña presidencial al impedirle en las últimas semanas celebrar mítines electorales en varias ciudades del país.

(Fuente: EFE)