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Medio ambiente. Con el inicio de esta nueva legislatura, el Congreso de la República tiene en sus manos la oportunidad de aprobar una iniciativa legislativa que regule la comercialización y uso de plásticos de un solo uso. No se trata de una solución novedosa, ya son muchos los países y ciudades que cuentan con normas que buscan reducir la contaminación por plásticos como México, Colombia, Ecuador y Chile, por citar a algunos de la región.

Hasta el 95% de la basura marina encontrada en las costas, superficie del mar y fondo del océano está compuesta por plásticos: bolsas, envases de alimentos, botellas y cañitas; componentes industriales; y artículos relacionados con la pesca o la acuicultura.

El Perú no es ajeno este problema, al contrario, la falta de infraestructura y pobre sistema de gestión de residuos nos ponen en una situación desalentadora. Con solo 26 rellenos sanitarios, casi el 50% de nuestros residuos termina en botaderos, el ambiente, en ríos, mares y lagos. Al ritmo que vamos – solo en Lima y Callao se usan más de 3 millones de bolsas plásticas al año y se generan 886 toneladas de residuos plásticos al día – el cambio no puede esperar.

¿Qué hacer ante esta situación? Siendo que la principal fuente de basura marina plástica son los desechos de las ciudades y que remover lo que ya se ha acumulado en los océanos sería un reto monumental por sus altos costos y complejidad; la solución más efectiva es la prevención.

(El 95% de basura marina encontrada en las costas, la superficie del mar y el fondo del océano está compuesta por plásticos / Foto: Oceana / Enrique Talledo)

Se requiere adoptar medidas para reducir la fabricación y/o el uso y distribución de materiales plásticos, específicamente aquellos de un solo uso que pueden remplazarse por alternativas reutilizables de larga duración. La solución no pasa solo por buscar sustitutos que puedan ser producidos en los mismos volúmenes, sino sobre todo por reducir el consumo indiscriminado de productos desechables.

Para lograrlo, a la par del cambio de hábitos de los consumidores, es clave el compromiso de empresas responsables que se sumen a esta iniciativa y sean agentes de cambio. Finalmente, necesitamos que el Perú cuente con un marco normativo oportuno y eficiente; con metas ambiciosas y plazos adecuados que permitan la adaptación de la industria y comercios y lograr una correcta implementación de la norma.

Si bien no podemos ni queremos regresar a un mundo libre de plásticos, sí podemos eliminar de nuestras vidas el uso de productos desechables, aquellos que pasan cinco minutos en nuestras manos y más de 100 años en los océanos. El Congreso tiene la oportunidad de impulsar este cambio y el momento de hacerlo es ahora.

Escrito por Carmen Heck
Directora de Políticas de Oceana

Sobre la autora

Carmen Heck es una abogada especializada en derecho pesquero, ambiental y de recursos naturales. Cuenta con amplia experiencia en propuestas de políticas públicas para la sostenibilidad de recursos naturales. Además, ha sido directora del Programa de Ciudadanía y Asuntos Socioambientales de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental, así como consultora del Centro para la Sostenibilidad Ambiental de la Universidad Peruana Cayetano Heredia.