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Steven Sotloff, el segundo periodista estadounidense decapitado por la milicia radical Estado Islámico, “trataba de encontrar el bien escondido en este mundo de oscuridad”, expresaron hoy sus familiares.
“Steve no fue un héroe. Se dedicó a dar voz a quienes no la tienen. Él anhelaba una vida tranquila, en la cual pudiera disfrutar de los juegos de los Dolphins de Miami los domingos y un trabajo ordinario los lunes que le diera una vida confortable de clase media”, indican sus parientes en un comunicado.
Los deudos de Sotloff viven en Miami, Florida. Ellos se han mantenido alejados de la prensa por privacidad. El reportero de 31 años fue secuestrado a mediados de 2013, probablemente en Siria.
ENLACE: Barack Obama: ‘‘Ejecución de Steven Sotloff no nos intimidará’‘
Las imágenes de la decapitación de Sotloff se divulgaron el martes 2, a dos semanas del difundirse el video de la ejecución de su colega y compatriota James Foley. En la ciudad de Miami se organizan ceremonias de conmemoración por el periodista.
“Sus horrendos actos solo nos unen como país y hace más enérgica nuestra determinación de llevar la lucha contra estos terroristas. Y quienes cometen el error de causar daño a los estadounidenses aprenderán que no olvidaremos y que nuestro alcance es largo y se hará justicia”, manifestó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, sobre los actos del Estado Islámico.