(Foto: EFE)
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El Gobierno de Paraguay rechazó la denuncia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) de no haber actuado correctamente en el caso de la menor de 10 años embarazada por violación.
En ese sentido, Asunción expresó hoy su apoyo a la protección de los derechos de la niñez y la adolescencia.
La pequeña tiene cinco meses de gestión, presuntamente a consecuencia de abusos sexuales de su padrastro, lo que se conoció en abril tras ingresar a un hospital de la capital paraguaya.
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La madre fue recluida en prisión preventiva y su pareja, quien estaba prófugo, fue arrestado e internado en la prisión de Tacumbú.
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El peligro para la vida de la madre es la única opción para poder interrumpir el embarazo de manera legal en Paraguay, norma criticada por la ONU, que consideró que el país sudamericano “ha fracasado en su responsabilidad de actuar con la debida diligencia”.
“El Estado es consciente de la delicada situación de la menor, teniendo en cuenta su edad, que implica riesgos mayores, por lo que se han extremado los cuidados especiales mediante la conformación de una Junta Médica multidisciplinaria”, indicó la cancillería.
