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Luego que se generara gran polémica por las palabras del papa Francisco sobre el riesgo de “mexicanización” de Argentina, el Vaticano se disculpó con el pueblo de México asegurando que no hubo una “intención estigmatizante”.
“La Santa Sede considera que el término ‘mexicanización’ de ninguna manera tendría una intención estigmatizante hacia el pueblo de México y, menos aún, podría considerarse una opinión política en detrimento de una nación que viene realizando un esfuerzo serio por erradicar la violencia y las causas sociales que la originan”, se indicó en un comunicado enviado a los medios.
En el documento, según la Embajada mexicana, “la Santa Sede reconoció el excelente momento por el que atraviesan las relaciones con México” y afirmó que el papa Francisco “en ningún momento, ha pretendido herir los sentimientos del pueblo mexicano ni los esfuerzos del gobierno del país”.
ENLACE: PAPA FRANCISCO: ARGENTINA DICE QUE EL PONTÍFICE NO TUVO VOCACIÓN DE AGRAVIAR A MÉXICO
Se agrega que “la Santa Sede considera que la gravedad del fenómeno del narcotráfico en Latinoamérica ha obligado a que los gobiernos, como es el caso de México, establezcan programas para combatir la violencia, devolver la paz y la tranquilidad a las familias, incidiendo sobre las causas sociales que la originan”.
Con la respuesta de la Santa Sede, México da por finalizada la polémica en torno a este asunto “por vía diplomática” precisando que “estamos satisfechos por la respuesta pronta de la Santa Sede y por el contenido de la nota”.
El embajador de México ante la Santa Sede, Mariano Palacios Alcocer, precisó que “la polémica por la vía diplomática ha quedado zanjada, independientemente de que el tema dará para comentarse”.
La polémica se generó luego que el papa Francisco enviará una carta dirigida al legislador porteño Gustavo Vera en la que pidió “evitar la mexicanización” de Argentina con relación al avance del narcotráfico.
“Estuve hablando con algunos obispos mexicanos y la cosa es de terror”, afirmó el pontífice en la misiva.
Esta no es la primera vez que la manera directa y franca de hablar del papa Francisco le genera inconvenientes al Vaticano.
En enero, el vocero del Vaticano, reverendo Federico Lombardi tuvo que explicar que el pontífice no justificaba la violencia cuando, en reacción a los ataques terroristas en París a la revista satírica Charlie Hebdo, el papa Francisco dijo que quien insulta a su madre puede esperar “una nalgada” como respuesta.
El papa Francisco también tuvo que justificarse cuando comentó que los católicos no tenían que reproducirse “como conejos” y elogió a las familias numerosas como un don de Dios.