El mandatario Enrique Peña Nieto presentó en mayo una propuesta para reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción homoparental. (Fuente: EFE)

El mandatario Enrique Peña Nieto presentó en mayo una propuesta para reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción homoparental. (Fuente: EFE)

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La Archidiócesis Primada de México hizo hoy un llamado a que el presidente Enrique Peña Nieto se reúna con los organizadores de las recientes marchas contra la propuesta de reconocer constitucionalmente el matrimonio entre personas del mismo sexo.

En un editorial publicado en su semanario Desde la fe, la Archidiócesis católica aseveró que “después de las marchas multitudinarias en defensa de la familia que se realizaron en septiembre pasado, la sociedad mexicana comenzó un sorprendente movimiento que no sólo se quedó en la manifestación pública”.

El movimiento, aseguró, se extendió también a “la organización y lucha por el respeto de la célula fundamental de la sociedad y la observancia de los derechos humanos”.

“La formación del movimiento cívico que aglutina al Frente Nacional por la Familia (FNF) y la Unión Nacional Cristiana por la Familia (UNCF) tiene por objetivo el fomento del diálogo entre los distintos actores políticos y sociales, a fin de desistir de los aspectos que atentan contra el matrimonio y la integridad de la familia”, expuso.

Uno de sus propósitos “es el encuentro con el Presidente de la República, cuya propuesta para reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción homoparental (presentada en mayo pasado por el mandatario) causó una enorme inconformidad social”.

De acuerdo con la cúpula eclesiástica, el Gobierno “parece no escuchar el justo clamor social que cimbró a la Ciudad de México y al país entero”.

Reconoció que la Cámara de Diputados, “donde reposan, y parece ser sin mayor vigor y respaldo, las dos infortunadas iniciativas”, abrió sus puertas “al naciente movimiento cívico donde se escuchó el rechazo a estas políticas que pretenden desmantelar el matrimonio y la familia”.

“Ahora debemos esperar la apertura política del Ejecutivo para sentarse a la mesa con los organizadores de las marchas en favor de la familia, escucharlos y atender sus razones, que son las de la sociedad mexicana que sigue teniendo en un alto valor a la familia y los valores antropológicos, éticos y morales que la conforman”, puntualizó.

(Fuente: EFE)