Justin Trudeau, primer ministro de Canadá. (Foto: cortesía Justin.ca)

Justin Trudeau, primer ministro de Canadá. (Foto: cortesía Justin.ca)

Síguenos en Facebook



Justin Trudeau , que este miércoles se convirtió en el vigésimo tercer primer ministro en la historia de Canadá , es un maestro de escuela y el hijo de uno de los políticos más importantes de la historia moderna del país, Pierre Trudeau, aunque parece dispuesto a dejar su propia marca en Ottawa .

Es difícil no nombrar a Justin Trudeau sin incluir en el mismo párrafo a su padre, que gobernó Canadá de 1968 a 1984 con sólo una breve interrupción de 1979 a 1980.

A sus 43 años, sin embargo, el nuevo primer ministro canadiense ya ha empezado a hacer las cosas a su manera.

Justin Trudeau, el primero de los tres hijos que Pierre Trudeau tuvo con Margaret Sinclair y que creció en 24 Sussex Drive, la residencia oficial en Ottawa del primer ministro canadiense, ha decidido que su investidura sea tan abierta al público como sea posible.

Los jardines de Rideau Hall, la residencia en Ottawa del gobernador general de Canadá donde se desarrolló la ceremonia, fueron abiertos para que cualquier canadiense pudiese acudir al evento.

En contra de la pompa y solemnidad clásica del desfile de limusinas blindadas transportando al nuevo gobierno a la ceremonia de investidura, Justin Trudeau y los ministros de su primer gabinete, que también tomaron hoy posesión de sus cargos, llegaron a Rideau Hall como un equipo a bordo de un autobús.

Y el primer acto público del líder del Partido Liberal tras jurar el cargo de primer ministro de Canadá ha sido una sesión de preguntas y respuestas con los niños de cinco escuelas canadienses a través de Google Hangout en internet.

No en vano, la profesión de Justin Trudeau es la de maestro de escuela.

Tras obtener su licenciatura en Literatura Inglesa en la Universidad McGill de Montreal y en Educación por la Universidad de Columbia Británica, el nuevo primer ministro canadiense trabajó como profesor de francés y matemáticas en la ciudad de Vancouver.

Su vida parecía destinada a transcurrir en un relativo anonimato, pero dos muertes en la familia le empujaron a la vida pública.

La primera fue el fallecimiento de su hermano Michel, el más pequeño del matrimonio de Pierre y Margaret.

Michel murió en 1998, tras quedar sepultado en una avalancha mientras esquiaba en la provincia de Columbia Británica.

Tras la muerte de Michel, Justin Trudeau empezó a trabajar para mejorar la seguridad en las montañas canadienses y tratar de evitar más fallecimientos por avalanchas.

Pero fue el funeral por su padre, que falleció en octubre del año 2000, el que le catapultó al escenario público y le convirtió en la esperanza futura de renovación del Partido Liberal.

Justin Trudeau ofreció un emotivo panegírico en el funeral que fue seguido por millones de personas a través de televisión.

Al funeral, celebrado en la basílica de Notre-Dame de Montreal, la misma en la que en 1972 fue bautizado, asistieron el entonces jefe de Estado cubano, Fidel Castro, y el expresidente de Estados Unidos Jimmy Carter, así como el Aga Khan, entre otras personalidades.

Imágenes como las de Justin Trudeau, entonces de 29 años, abrazando entre lágrimas a un emocionado Fidel Castro, y la reacción favorable de la mayoría de los canadienses dejaron claro a los líderes liberales que el hijo de Pierre y Margaret tenía el carisma para liderar un día el partido.

Pero Justin Trudeau se lo tomó con calma y esperó hasta 2008 para entrar en el mundo de la política.

En las elecciones de ese año se presentó como candidato del Partido Liberal y ganó un escaño en uno de los barrios más problemáticos y populares de Montreal, Papineau, que hasta entonces había votado a los separatistas quebequeses.

A pesar de su apellido, Justin Trudeau se mantuvo como un diputado liberal más hasta 2013 cuando, tras el desastre electoral de 2011 en el que el Partido Liberal quedó diezmado y descabezado, se convirtió en el líder de la formación política.

Su último triunfo fue en las elecciones generales del 19 de octubre cuando, contra todo pronóstico, consiguió una amplia victoria sobre el Partido Conservador y el hasta hoy primer ministro, Stephen Harper.

Los conservadores intentaron impedir el triunfo de Justin Trudeau con una machacona campaña publicitaria que aseguraba que el mejor atributo del líder liberal era su pelo y que no estaba preparado para ser primer ministro, algo que hoy ha quedado desmentido.

(Fuente: EFE)


Si te interesó lo que acabas de leer, te invitamos a seguirnos en Facebook y Twitter