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Al meno 50 personas, la mayoría policías, resultaron heridas en la marcha de judíos etíopes contra acusaciones de racismo y brutalidad policial en la capital de Israel.
Las manifestación respondió a un video difundido días atrás en el que se ve a un israelí de origen etíope vestido con el uniforme del Ejército mientras era golpeado por un agente en la ciudad de Holón.
Los protestantes arrojaron piedras, botellas y sillas a las fuerzas del orden, que replicaron con cañones de agua y bombas lacrimógenas. Hubo unos 27 detenidos.
El primer ministro de Tel Aviv, Benjamin Netanyahu, lamentó el incidente que derivó en la suspensión e investigación contra el policía. El lunes 4 tenía previsto reunirse con líderes de la comunidad africana y con el militar maltratado.
