España mantendrá política antiterrorista pese al fin de ETA

El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró hoy jueves que mantendrá la política en materia antiterrorista, pese a que el grupo separatista vasco Euskadi Ta Askatasuna (ETA) anunció su disolución definitiva.

“La única política de futuro en materia antiterrorista es aplicar la ley”, declaró Rajoy durante un acto en Logroño, norte de España, según un comunicado difundido por la Presidencia, antes de conocer el documento publicado este jueves por ETA en el que informó que desmantela “completamente el conjunto de sus estructuras”.

La respuesta de Rajoy, líder de los conservadores del Partido Popular, aclara las intenciones del Ejecutivo ante el debate que se abre ahora en toda la sociedad de si, una vez desaparecida ETA, se puede responder a uno de sus anhelos históricos y acercar a sus presos, actualmente esparcidos por toda España, a cárceles más próximas al País Vasco.

ETA asesinó a más de 850 personas en los últimos 50 años en nombre de la independencia de Euskal Herria, territorio comprendido entre el País Vasco, en el norte de España, y algunas zonas del suroeste francés, por lo que muchos de sus integrantes provienen de esa área.

RESPALDO A LA POSTURA DE RAJOY

El teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Angel Carballo, declaró al periódico “El País” que el fin de ETA “no va a tener influencia alguna” en la actividad jurídica.

“Seguiremos trabajando a contrarreloj para tratar de esclarecer los 358 crímenes sin resolver que ha dejado la banda en sus 60 años de actividad”, dijo.

“Este anuncio no impedirá que desde este órgano se siente en el banquillo de los acusados a quienes se considere responsables de estos hechos, en la medida en la que las pruebas así lo determinen”, confirmó.

Las asociaciones de víctimas del terrorismo nacionalista vasco también respaldaron la postura de Rajoy.

El presidente de la asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia (DyJ), Daniel Portero, avisó al gobierno que les tendrá enfrente “si se produce un solo acercamiento de presos de ETA antes de que se esclarezcan los 379 atentados de la banda”, según versiones difundidas por la prensa local.

Sin embargo, no toda la sociedad española está de acuerdo con la postura oficial.

El ex “lehendakari” (presidente regional vasco), Patxi López, uno de los rostros protagonistas del proceso, advirtió que la dispersión de presos de ETA sólo sirve para “victimizar” a su entorno.

“El alejamiento, al día de hoy, sólo sirve para la victimización de ese mundo. Una política penitenciaria diferente es posible, sin calendario y con discreción”, afirmó López, que en los años más duros del terrorismo nacionalista vasco vivió amenazado por ETA y perdió a varios compañeros de partido asesinados.

Sin embargo, pidió que no se asocie el cambio en la política penitenciaria (una antigua reivindicación del socialismo vasco) con el fin de la banda terrorista.

“Entonces parecería un cambio de cromos”, dijo López en unas declaraciones a medios locales en las que criticó duramente el papel de ETA durante toda su trayectoria.

Durante el gobierno de José María Aznar (1996-2004), el último presidente conservador antes de Mariano Rajoy, se realizaron acercamientos de presos de ETA a las cárceles vascas.

Está previsto que ET*A escenifique mañana viernes en Bayona, localidad francesa cercana a la frontera española, su último coletazo con una representación internacional en la que participarán el abogado sudafricano, *Brian Currin, y el alcalde bayonés, Jean René Etchegaray, en la que se levantará acta notarial de su desaparición como organización.

Fuente: Xinhua