(Foto: USI)
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Los deudos de las víctimas del incendio en la discoteca Utopía (2002) expresaron su satisfacción tras el fallo de la Sala Constitucional y Social Permanente de la Corte Suprema de Justicia, que decidió comprender en el caso judicial a Édgar Paz y Alan Azizollahoff, administradores del siniestrado local surcano.
“Nos produce una tranquilidad de espíritu saber que se va a juzgar y saber que el debido proceso ha sido amparado por la Corte Suprema”, dijo Luis Delgado Aparicio, padre de una de las jóvenes fallecidas en el fatal hecho.
Por su parte, Roberto Valverde, padre de Milagros Valverde Ocaña, otra de las jóvenes fallecidas, dijo que la decisión de la Corte creará jurisprudencia.
“Este es un caso que va a determinar que a partir de ahora todo aquel que sea gerente o dueño de una empresa, y en esta se produzcan muertes, el destino será la cárcel si es que incurre en el incumplimiento de las medidas de seguridad que se deben cumplir”, aseveró.
A su vez, el padre de Sandra Ceballos Menchelli dijo estar conforme con la orden judicial. No obstante, lamentó que el expediente del caso haya estado en compás de espera durante cinco años.
“También se tiene que tomar en cuenta cómo ha trabajado la Sala Superior Constitucional de derecho. Cinco años haber detenido un expediente encajonado, ¿obedeciendo las maniobras de Alberto Quimper? Es una vergüenza (…) esta es la mejor prueba de la delincuencia que hay en este Poder Judicial”, sentenció.
