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Río de Janeiro: Duplican número de policías por violencia en víspera a elecciones

La Gobernación de Río de Janeiro duplicó hoy, de 15.000 a 30.000, el total de policías en las calles de la ciudad brasileña, debido a la ola de violencia que estalló en favelas y ya dejó un saldo de cinco muertos, en vísperas de las elecciones presidenciales y estatales del domingo 5.

El secretario de Seguridad Pública, José Mariano Beltrame, explicó que el refuerzo de la seguridad estaba programado para iniciarse el sábado 4, pero se adelantó para prevenir enfrentamientos en los barrios ocupados por las fuerzas del orden

A tres días de las elecciones presidenciales del domingo 5, cinco muertos es el saldo de enfrentamientos entre fuerzas del orden y pobladores de favelas en Río de Janeiro.

El gobernador del estado brasileño, Luiz Fernando Pezao, se reunió hoy de emergencia con su consejo para buscar medidas que frenen la ola de violencia. Los disturbios ocurrieron en zonas supuestamente pacificadas, ocupadas por policías y militares con el fin de erradicar a las bandas de narcotraficantes.

En el conjunto de favelas de Maré, controlada desde abril por tropas del Ejército que preparan la instalación del proyecto de Unidades de Policía Pacificadora, se registraron la noche del miércoles 1 dos tiroteos que paralizaron el tránsito en la avenida Brasil y dejaron dos fallecidos.

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En otros barrios, como Alemao, Vila Cruzeiro, Rocinha y Mangueira, murió un presunto delincuente en una balacera. En la ciudad vecina de Niteroi un turba incendió un bus y un auto en protesta por la muerte de dos adolescentes durante una operación contra traficantes.

Pezao, candidato favorito a la reelección en los comicios del domingo, recibió un informe sobre los sucesos y sobre las acciones que serán adoptadas para controlar la ola de violencia, pero no las reveló a la prensa.

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La Gobernación de Río de Janeiro señaló que aún no tiene informaciones que vinculen los problemas en las favelas a las elecciones, pero recordó que en vísperas de los comicios de 2006 y 2010 también hubo “una predisposición al desorden urbano, intentos de desestabilizar”.

Aparte de Río, en el sureño estado de Santa Catarina se vive el sexto día de una ola de ataques, al parecer ordenados desde los penales por líderes de la organización criminal denominada Primer Grupo Catarinense (PGC), que dejaron hasta ahora tres muertos. Se han reportado 52 ataques y 17 buses fueron incendiados, por lo que se suspendió el servicio de transporte público.