Volcán de Fuego: erupción en Guatemala concluye y deja remanentes de lava
La erupción del volcán de Fuego , ubicado a unos 50 kilómetros al oeste de la capital de Guatemala , concluyó la madrugada de hoy después de 16 horas de actividad que dejó remanentes de flujo de lava.
“La tercera erupción (del año) del volcán de Fuego ha finalizado luego de 16 horas”, en concreto a las 5.30 hora local (11.30 GMT), informó este domingo el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
Agregó que desde el complejo volcánico se observan remanentes de flujos de lava de 3 kilómetros de longitud en las barrancas Santa Teresa, Las Lajas y Trinidad, además de explosiones débiles y moderadas con sonidos de desgasificación y pequeños retumbos.
Las columnas de ceniza lanzadas por el volcán de Fuego que alcanzaron los 5.000 metros de altura, se desplazaron a más de 80 kilómetros al oeste y se reportó su caída en el área del lago de Atitlan, Chicacao, Mazatenango, Retalhuleu, El Palmar y otros en esta zona, de acuerdo a la información oficial.
El Insivumeh dijo que la estación sísmica registra actividad normal, y recomendó a la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) adoptar las precauciones necesarias ante la probabilidad de descenso de flujos piroclásticos.
También instó a la Dirección General de Aeronáutica Civil a tomar medidas debido a que la ceniza aún se desplaza a 30 kilómetros en dirección oeste y suroeste.
El volcán de Fuego es junto al de Pacaya situado en el departamento sureño de Escuintla y el Santiaguito, en Quetzaltenango (oeste), el más activo de los 32 colosos que tiene Guatemala.
(Fuente: EFE)
DATOS CLAVES SOBRE VOLCANES
Un volcán es una estructura geológica de la que emerge magma en forma de lava, ceniza volcánica y gases provenientes del interior de la Tierra.
El ascenso del magma ocurre en episodios denominados erupciones que pueden variar en intensidad y duración. Pueden ser suaves o explosiones extremadamente destructivas como la erupción del Krakatoa.
Los volcanes pueden ser durmientes o inactivos. Estos mantienen algunos signos de actividad como aguas termales, pero desde hace siglos no tiene erupciones. También existen los extintos, cuya última erupción fue hace más de 25.000 años. Sin embargo, los especialistas no descartan la posibilidad de vuelvan a despertar.
Los volcanes activos son aquellos que presentan actividad continuamente.