'Stranger Things' no iba a ser apta para todos originalmente

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Stranger Things no siempre fue pensada para todo público. De hecho, su episodio piloto fue considerado apto solo para adultos.

Si bien el tono de la serie de Netflix de por sí es oscuro por todas las calamidades dejadas por el Demogorgon, originalmente esta producción fue aún más tétrica, con Eleven (Millie Bobby Brown) siendo un personaje mucho más violento y trastornado.

“El personaje de Eleven, el tipo de poderes que tiene y tener a una joven protagonista que es violenta – no es E.T. –, no es una situación feliz. Mata gente. Los asesina brutalmente”, declaró Ross Duffer.

Eleven fue mucho más violenta originalmente (Foto: Netflix)

En conversación con Vulture, los creadores de Stranger Things indicaron que Eleven terminó matando gente en la primera temporada del drama de ciencia ficción, pero prefirieron no incidir en estas escenas y en lugar de eso centrarse en las vertientes más simpáticas de la niña, como su adicción por los waffles. Del mismo modo, otros personajes de la serie sufrieron similares cambios en la transición de R (contenido restringido) a PG (apto para todo público).

“El piloto original fue mucho más violento. Originalmente era como una cosa de calificación R. El personaje de Winona era un ‘mierda esto, mierda aquello’. Se sentía un poco innecesario. No siento que hayamos sacrificado algo para tonificarlo un poco”, señaló Matt Duffer.

No obstante, después de apelar a un tono nostálgico en su primera temporada, Stranger Things recuperará sus raíces oscuras en su segunda entrega, que Netflix estrenará este 2017.

“La temporada 2 es más grande y potencialmente más oscura en sus apuestas. La amenaza, que en la temporada 1 fue para Will Byers, ha crecido. Eso es todo lo que voy a decir. Pero sí voy a decir que la temporada 2 tiene un elenco más grande y es, sin duda, leal al tipo de narración mágica que establecimos en la primera temporada, basada en los personajes y todavía sobre nuestro núcleo de personajes”, agregó el director y productor ejecutivo de Stranger Things, Shawn Levy, en conversación con Vanity Fair.