Terry Gilliam, memorias desde la realidad y la imaginación

A sus 75 años, el cineasta Terry Gilliam presenta el libro Gilliamismos (memorias prepóstumas), un alocado recorrido por su vida y obra a través de una galería de fotos y dibujos del exintegrante del mítico conjunto de comedia Monty Python.

“Me gusta trabajar, aunque a mi aire. En mi caso ha dado sentido a mi vida. También se debe a una confusión: yo llamo trabajar a hacer cosas: espectáculos, dibujos, películas…En definitiva hacer reír a la gente”, explica a El País acerca de la contradicción entre su ritmo de producción y su declarada aversión por el trabajo.

El maestro del humor absurdo, creador de una filmografía extravagante y muy personal, apela tanto a la memoria como a la imaginación al repasar su biografía en el libro. En suma, al surrealismo del que el artista estadounidense nacionalizado británico es uno de los últimos maestros en la pantalla.

“Al ponerse en marcha la grabadora empecé a parlotear sin descanso, y hemos acabado […]en una especie de persecución automovilística de mi vida hecha a todo trapo. Al no poder discernir entre sueño y realidad se me ha dispensado de la desilusión que supone despertarse por haber caído de la cama y comprobar de ese modo tan brusco que mis recurrentes sueños no han ocurrido de verdad”, añade.

El universo de las películas de Terry Gilliam, a excepción de The Fisher King y su aún inacabada versión de El Quijote, se ubica en otros tiempos, ante lo que el realizador de Twelve Monkeys profundiza dentro de su relación con la realidad y la fantasía.

“Haciendo el libro me di cuenta de ese detalle. Al visitar un estudio donde se grabaron clásicos del western, efectivamente el lugar me pareció mucho más dramático en pantalla, luego reflexioné y entendí que solo cuando tu imaginación arranca las cosas se ponen interesantes”, acotó.