Hay muchos que aman leer en sus tablet, pero otros no se quieren despegar de sus libros físicos. (Foto: Pixabay)
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Con el uso constante de smartphones o tablets, para más de un amante de la lectura se volvió una constante recurrir a los e-books (libro en versión digital) para así no perder el hábito sano de la lectura en niños, adolescentes y adultos pero, ¿por qué es importante implementar una biblioteca física en casa?
“Es muy bueno tener acceso a los e-books, pero resulta menos cómodo cuando en la web se encuentra información a veces densa. Por eso es que previamente debemos familiarizarnos con los libros físicos y tener un adecuado hábito de lectura”, explicó Enrique Briceño Medina.
El jefe de la Biblioteca de la Universidad Católica San Pablo de Arequipa explicó que el hecho de estar en contacto frecuente con herramientas que brinden conocimiento adecuado como son los libros , preparará a los más pequeños de la casa a utilizar correctamente el Internet, así como investigar y encontrar nuevas informaciones.
La formación de los niños es vital con la ayuda de libros, es por esto que Briceño Medina recomienda a los padres no perder el hábito de lectura para así estimularlos a expresar sus ideas, fomentar la imaginación y mejorar su comunicación. En cuanto a los jóvenes, se puede recurrir a publicaciones que expliquen los temas que ellos quieren conocer y van acorde a sus gustos.
Si tu idea es destinarle un ambiente de tu casa o departamento a la instalación de una biblioteca para cuidar de manera especial tus libros físicos, aquí te dejamos algunas consideraciones a tener en cuenta:
1. Espacio: debe ser un lugar pensado como salón de estudio y debe contar con poco tránsito de personas para evitar la distracción. Además, debe ser un ambiente fresco y seco para evitar los hongos y ácaros en los libros.
2. Mobiliario: contar en la habitación con sillones cómodos para los lectores y un estante que permita ubicar adecuada y fácilmente los libros.
3. Clasificación: los libros deben ser ordenados por materia; esto facilitará la ubicación de las lecturas. Los textos infantiles podrían estar en la parte baja de la biblioteca para que los niños pueden tener acceso con mayor facilidad.
4. Cuidarlos: forrar los libros es importante para conservarlos en el tiempo y contrarrestar los daños que puedan ocasionar el sol o la humedad.
