'One Day at a Time', temporada 2: desgarrador final quiebra a todos, incluida Rita Moreno

El final de temporada de One Day at a Time (Un día a la vez) ha sido uno de los momentos más emotivos de la presente temporada televisiva y tal carga de sentimientos no solo fue experimentada por los espectadores de la comedia familiar, sino también por sus mismos actores. De hecho, grabar el capítulo no fue nada sencillo, sobre todo ante un público que lloraba y lloraba ante los desgarradores monólogos de los personajes del show.

‘Not Yet’ (‘Todavía no’, 2×13) es el último episodio de la segunda temporada de One Day at a Time y mientras lo escribían, los guionistas lloraron. Cuando se realizó la lectura del guión, los actores lloraron. Y cuando grabaron con público, desde las gradas se escuchó “¡no!” varias veces. La misma Rita Moreno apenas podía contener las lágrimas cuando debía quedarse quieta en una cama de hospital mientras el resto de actores se acercaban para expresarle lo que sentían ante la posibilidad de perderla.

Después de una discusión con su hija, Penélope (Justina Machado), Lydia, el personaje de Moreno, sufrió una emergencia médica por la que debió ser operada e inducida en una coma que se extendió por varias horas.

“Recuerdo que en un momento me dije a mí misma, ‘no, no puedes llorar, no puedes llorar, se supone que debes estar inconsciente’”, contó Moreno a Vulture. Sin embargo, inevitablemente una lágrima corrió por su rostro.

“Creo que era mi ojo derecho y hablé con la lágrima y le dije: ‘¡No te atrevas!’. Lo hice, reprendí a la lágrima. Le dije: ‘No te atravesar a acercarte a mi mejilla, ¡te mataré!’”, recordó la actriz de 86 años.

Lydia estuvo varias horas en coma (Foto: Netflix)

Moreno creía que sería fácil grabar el episodio. Solo debía quedarse quieta y quizá dormir, pero no pudo hacer más que conmoverse por todo lo que decían los otros actores a partir de las líneas escritas por Gloria Calderon Kellett y Mike Royce, las showrunners de la serie.

En conversación con el mismo medio, Calderón Kellett explicó que el sello de One Day at a Time es la multicámara y aprovecharon esta técnica para que cada personaje tenga la oportunidad de llegar al corazón de los espectadores.

“El truco fue conectar los monólogos, tener momentos ligeros y emotivos. Es lo más fiel al teatro de cualquier episodio que hemos hecho esta temporada”, indicó la guionista.

Mientras esperan que despierte, la familia Álvarez expresa sus sentimientos por la abuela. Alex (Marcel Ruiz) le pinta las uñas, comparte chismes de la iglesia y le habla de su telenovela favorita; Elena (Isabella Gomez) le pinta los labios mientras lamenta haber olvidado su español y haber perdido su conexión con su abuela a partir de eso; el Dr. Leslie (Stephen Tobolowsky) le confiesa cuánto la ama; Schneider (Todd Grinnell) ilumina su habitación y revela cómo empezó su conexión con la familia: gracias a Lydia y su apoyo durante su rehabilitación; y Penélope… Penélope fue quien finalmente la quebró en su descanso.

Penélope seguía enojado por su pelea, pero mientras habla admite que no está lista para perder a su madre, le canta Cielito lindo y se acuesta a su lado, y eso fue demasiado para Moreno.

“Hubo un par de veces durante el monólogo de Penélope que tuvimos que limpiar las lágrimas de Rita”, reveló Calderón Kellet.

La escena de Penélope y Lydia hizo llorar a muchos (Foto: Netflix)

Ahora, si bien Lydia despierta, ¿la producción realmente evaluó sacarla de la serie? La misma showrunner señaló que no, “¡nunca mataríamos a Lydia!”, a pesar de haber llevado a un sacerdote al hospital y de la onírica escena con Berto (Tony Plana), el difundo esposo de Lydia.

“Soy bastante buena para anticipar la reacción de la audiencia, pero cuando Tony entró por primera vez (a escena), la audiencia perdió la cabeza y tuvimos que pedirle a nuestra directora Pam Fryman que les dijera que no podían hacer eso. ¡La gente estaba en shock!”, contó Calderón Kellet.

La impresión fue tal que la producción repartió pañuelos de papel entre el público que presenció la escena, pero la alegría volvió cuando Lydia le dijo a Berto que “todavía no, mi vida”. Todavía no estaba lista para irse.

“Es un verdadero nudo en la garganta, ¿no? Estos escritores son asesinos”, finalizó Moreno.

Lydia le dijo a Berto que aún no está lista para irse (Foto: Netflix)