(Foto: HBO)

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Cuidado, alerta de spoiler. High Sparrow, tercer episodio de la quinta temporada de Game of Thrones (Juego de tronos), dio punto de partida a la interrelación entre las distintas historias de la serie. Personajes que nunca cruzaron sus caminos, por fin se vieron las caras en un capítulo que incluyó una boda y una decapitación.

EN BRAAVOS

En The House of Black and White (Casa de Blanco y Negro), Arya (Maisie Williams) no está contenta con sus labores domésticas. Mientras barre el suelo recrimina a Jaqen H’ghar (Tom Wlaschiha), quien replica que su impaciencia es señal de que “una chica quiere servirse a sí misma”.

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Previamente, el Hombre sin Rostro dio un poco de agua a un sujeto desesperado, quien pocos segundos después yace muerto en el suelo.

Más tarde, Arya pelea con otra de las aprendices de la casa y Jaqen vuelve a criticarle que quiera ser “nadie” cuando todavía mantiene sus pertenencias personales. Por esa razón, Arya se acerca a la costa y se deshace de su ropa, pero no puede hacer lo mismo con su espada, la que solo esconde entre unas piedras.

Cuando Arya vuelve a quejarse de sus deberes, Jaqen deja que la acompañe a la cámara donde limpian los cuerpos de las personas que mueren en la Casa de Blanco y Negro. “¿Qué hacemos con ellos después de que los lavamos?”, pregunta Arya a su compañera, pero no consigue ninguna respuesta. Solo se dedica a pasar la esponja por el cuerpo del hombre que falleció en la víspera.

EN KING’S LANDING

Cersei (Lena Headey) escucha desde su litera cómo el pueblo clama por la reina Margaery (Natalie Dormer), quien está a punto de casarse con el rey Tommen (Dean-Charles Chapman). La boda se realiza sin contratiempos y Cersei aplaude la unión sin mucha alegría. Para ella, Margaery es la “puta de Highgarden”.

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Esa noche, Tommen pierde su virginidad, aunque teme haber lastimado a su esposa, quien se muestra divertida por la inexperiencia del rey. Margaery sonríe cuando este le dice que “esto es todo lo que quiero hacer todo el día, todos los días, por el resto de mi vida”. Se supone que Margaery es virgen porque nunca consumó su matrimonio con Renly (Gethin Anthony) ni con Joffrey (*Jack Gleeso*n), pero parece que sabe lo que hace.

Al día siguiente, cuando Tommen y su madre pasean por la Red Keep, Cersei le pregunta al rey si cree que su esposa es inteligente y descubre que es así. Tommen sugiere a la reina madre que debe irse de King’s Landing y regresar a Casterly Rock porque “quiero que seas feliz, madre”, aunque en realidad es la voluntad de su esposa.

Poco después, Cersei visita a Margaery, quien cuenta a sus doncellas cómo fue el sexo con Tommen. Al encontrarse con su suegra, la reina la abraza solo para lanzarle después una serie de indirectas. “Me gustaría que tuviéramos un poco de vino para ti, pero es un poco temprano para nosotras” y “¿cuál es la forma correcta de dirigirme a ti ahora? ¿reina madre o reina viuda”, dice antes de agradecer a Cersei por educar tan bien a Tommen, quien la dejó “exhausta”.

Mientras todo eso tiene lugar, el Septón Supremo (Paul Bentley) visita el burdel y disfraza a unas prostitutas como los siete dioses. Sin embargo, su juego sexual es interrumpido por los Gorriones, quienes lo sacan desnudo a la calle para azotarlo en público.

El Septón exige a Cersei que castigue a los miembros de este culto religioso, pero en lugar de eso termina en la cárcel por haber ido a un burdel. Además, la reina madre visita al líder de los Gorriones, el Gorrión Supremo (Jonathan Pryce), quien parece ser una persona piadosa, pero las apariencias pueden engañar.

EN WINTERFELL

Winterfell hoy es un ocupado por los Bolton, quienes están dejando su huella en el antiguo territorio de los Stark con cuerpos desollados en las paredes. Theon (Alfie Allen) se queda viendo los cadáveres como quien recuerda lo que hizo en la ciudadela hace un tiempo.

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En la casa principal, Ramsay (Iwan Rheon) justifica sus métodos ante su padre, Roose Bolton (Michael McElhatton). El heredero de los Bolton torturó y asesinó a unos lords para que sus casas paguen sus impuestos, pero el Guardián del Norte dice que ese no es el camino para perpetuar su poder. Para Roose Bolton, la mejor manera de ganarse a los señores del Norte es el matrimonio. Es decir, Ramsey tiene que casarse con… Sansa Stark (Sophie Turner).

Si no fue suficiente comprometerse con Joffrey, ahora Sansa fue prometida al psicópata de la casa Bolton, algo que no está contemplado en A Song of Ice and Fire (Canción de hielo y fuego), saga en la que está basada Game of Thrones.

Al enterarse de su próximo matrimonio, Sansa le dice a ‘Litttlefinger’ (Aidan Gillen) que no se casará con Ramsay, que no es justo, que si es necesario no comerá, pero Lord Baelish intenta convencerla con estas palabras: “Hasta ahora has sido una espectadora de la tragedia. Deja de correr. No hay justicia en el mundo (…) ¡Véngalos!”. Con el matrimonio, Sansa recuperará Winterfell, pero parece ser que la intención de ‘Litttlefinger’ es que Sansa asesine a Roose Bolton, quien traicionó y asesinó a su hermano Robb (Richard Madden).

Al final, Sansa acepta su destino, mientras que Baelish solo sonríe. Sin embargo, resulta extraño su comportamiento porque hasta hace poco estaba obsesionado con la joven.

Solo unos pasos detrás de ellos están Brienne (Gwendoline Christie) y Pod (Daniel Portman), quienes en un alto se sinceran sobre sus historias personales. Brienne trata mal a Pod porque es la única forma que ella conoce, pero ahora se comprometió a ayudarlo a convertirse en un verdadero caballero.

Además, Brienne relató la historia de su devoción por Renly Baratheron. Cuando eran unos niños, el hermano del rey fue el único que no se burló de ella en una fiesta. Solo por este recuerdo, la guerrera ayudará a su escudero.

ENLACE: Game of Thrones: ¿Por qué decidieron casar a Sansa Stark con Ramsay Bolton?

Cuando Sansa se encuentra con Roose Bolton, se acerca lentamente a él como estuviera a punto de abofetearlo, pero al final fuerza una sonrisa antes de conocer a su prometido. A unos metros de ellos, Myranda (Charlotte Hope), la amante de Ramsay, la mira con odio.

Poco después, ‘Litttlefinger’ le asegura a Roose que Sansa sigue siendo virgen, pero él no parece muy interesado en eso. Por su parte, Ramsay promete jamás lastimar a su futra esposa, aunque Baelish no sabe de lo que este es capaz.

EN CASTLE BLACK

Jon (Kit Harington) rechaza la oferta de Stannis (Stephen Dillane) de convertirse en Jon Stark. De todos modos, el autodenominado rey le aconseja enviar lejos a Ser Alliser Thorne (Owen Teale) porque es falso aquello de mantener cerca a tus enemigos.

Más tarde, en sus primeras instrucciones como Lord Comandante de la Guardia de la Noche, Jon nombra Primer Explorador a Thorne en lugar de deshacerse de él. Sin embargo, decide alejarlo de Janos Slynt (Dominic Carter), a quien envía a liderar la reparación del castillo de Greygard, uno de los muchos puntos abandonados del Muro, pero este no quiere ir porque es un lugar vulnerable a los ataques.

Después de rechazar la orden en reiteradas ocasiones e insultar a Jon Snow, Janos espera el respaldo de Thorne, pero este lo deja solo. En esa línea, el Lord Comandante decide castigar con la muerte al rebelde porque no puede tolerar en el inicio de su mandato que un hombre lo decide públicamente.

Cuando es arrastro al patio para su ejecución, Slynt ruega por su vida, dice que “tengo miedo, siempre he tenido miedo”, pero Jon Snow de todas maneras le corta la cabeza, cosa que Stannis aprueba desde un balcón.

Sin saberlo, Jon ejecutó al hombre que traicionó a su padre, Ned Stark (Sean Bean), en la primera temporada de Game of Thrones.

EN VOLANTIS

Tyrion (Peter Dinklage) ya no soporta su encierro y sale a caminar por el gigantesco puente del camino a Meereen. En un burdel, el menor de los Lannister encuentra a una prostituta disfrazada de Daenerys Targaryen (Emilia Clarke). Otra meretriz se queja de que todos los clientes quieren estar con una reina, pero Tyrion responde que en su caso no es así. No obstante, el enano descubre que no quiere sexo, quizá por haber estrangulado a Shae (Sibel Kekilli).

En el mismo burdel se encuentra Ser Jorah (Iain Glen), quien luce triste y miserable tras ser expulsado del lado de Daenerys.

Cuando Tyrion sale a orinar, es maniatado por Jorah, quien le dice que “te voy a llevar con la reina”. Sin embargo, no precisa si habla de Cersei o de Dany.

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