(Foto: AMC)

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Cuidado, alerta de spoiler. Después de todo, Rick (Andrew Lincoln) se queda a cargo de Alexandría.

En Conquer, último episodio de la quinta temporada de The Walking Dead, los residentes de la zona segura discute la posibilidad de exiliar al sheriff por sacar su pistola y apuntar a todo el mundo con ella. Sin embargo, sus compañeros lo defienden en la reunión, aunque a Deanna (Tovah Feldshuh) ya no le gusta la idea de tener a Rick en la comunidad.

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Mientras la reunión tenía lugar, unos cuantos walkers atravesaron la puerta de ingreso de Alexandría, pero fueron aniquilados por Rick, quien llevó uno de los cuerpos hasta el cónclave para demostrar que lo necesitan sin importar cuál sea su estilo. Dicho sea de paso, estos zombis ingresaron a la zona segura porque el padre Gabriel (Seth Gilliam) no cerró el portón de la comunidad. ¿Fue intencional?

Cuando los residentes de Alexandría parecían aceptar la idea de tener a Rick entre ellos, ocurrió una tragedia. Pete (Corey Brill) irrumpió con un sable y por accidente degolló a Reg (Steve Coulter) cuando intentaba atacar al policía. Solo entonces Deanna le pidió a Rick que mate al médico y este lo hizo sin chistar. Para sumar drama al asunto, después de disparar, el sheriff voltea y se encuentra con Morgan (Lennie James), quien llegó a Alexandría junto a Daryl (Norman Reedus) y Aaron (Ross Marquad).

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Conquer había empezado con Morgan luchando contra dos hombres de las ‘w’. Uno de ellos dijo que se hacen llamar los Wolves (Lobos), entendiéndose entonces las pintas vistas hace unos episodios: “los Lobos no están lejos”. Más adelante, Morgan salvó a Daryl y Aaron de una muerte segura. Los reclutadores cayeron en una trampa de los Lobos, quienes habían encerrado a decenas de walkers en unos vehículos de comida enlatada.

Por su parte, Glenn (Steven Yeun) y Nicholas (Michael Traynor) ingresaron al bosque, donde se enfrascaron en una violenta lucha en la que el primero recibió un disparo en el hombro. Al final, Glenn se recuperó y estuvo a punto de liquidar al responsable de la muerte de Noah (Tyler James Williams), pero le perdonó la vida. Mientras eso ocurría, Sacha (Sonequa Martin-Green) buscó consuelo en el padre Gabriel, pero este salió con su prédica de que su grupo no merece estar en Alexandría. Además, habló mal de Tyreese (Chad Coleman) y Bob (Lawrence Gilliard Jr.). Sacha estaba lista para asesinarlo, pero Maggie (Lauren Cohan) la detuvo.

Para saber más, ahora hay que esperar el inicio de la sexta temporada de The Walking Dead.

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