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El baterista de Blink-182, Travis Barker, tiene un nuevo libro de memorias donde detalla su vida en la banda, robos a mano armada y un trágico accidente aéreo que dejó a cuatro personas muertas y al músico con graves lesiones en 2008. Además, en una entrevista por el lanzamiento de esta publicación, habla de su adicción a las pastillas.
“Mi desayuno eran cuatro cigarrillos, cuatro Vicodin, un valium, una oxicodona (…) porque esa era la única forma en la que podía salir de casa”, comentó Barker.
En conversación con Billboard, cuando se le preguntó acerca de su punto más bajo, el baterista recordó una gira de Blink-182 por Australia en 2004.
“Yo era tan adicto a la oxicodona que tenía un guardia que dormía durante el día para asegurarse por la noche que yo seguía respirando. Eso fue bastante patético. Mis huesos eran tan frágiles por haber uso tantos analgésicos”, reconoció Travis Barker.
El músico indicó que poco después, en un viaje a Europa, se sentía tan mal que “me identifiqué con un tacho de basura y no estaba orgulloso, estaba asustado”.
“Tuve que llamar a Mark (Hoppus) y decirle ‘oye, estoy cerca del suicidio, me estoy volviendo loco, tengo que ir a casa”, manifestó.
Travis Barker aseguró que está limpio desde hace 8 años al punto que continúa con su carrera. A principios de 2015 lanzó su primer single en solitario.
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#Blink182: Mark Hoppus dice que Tom DeLonge se divorció de la banda… :( http://t.co/AVnPf6azum pic.twitter.com/65Yn2n72DH
— La Prensa (@laprensaperu) Mayo 28, 2015
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