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El delantero sueco del Paris Saint Germain Zlatan Ibrahimovic asistió al partido de segunda ronda de Roland Garros entre Novak Djokovic y el luxemburgués Gilles Muller, en el cual celebró las mejores jugadas del tenista serbio.
Ibrahimovic, de origen bosnio, se ha convertido en un talismán para el número uno del mundo que el año pasado presenció su triunfo en la final de Bercy.
“Gracias por venir y por apoyarme siempre”, le dijo el tenista, que busca en París levantar el único Grand Slam que no posee.
Novak Djokovic, número uno del mundo, logró pasar a la tercera ronda del torneo tras derrotar a Muller, por 6-1, 6-4 y 6-4, en un partido marcado por los problemas físicos que obligaron al serbio a ser tratado sobre la pista.
Fue al final del segundo set, justo antes de que sirviera para cerrar la manga, cuando se quejó de la zona inguinal, el abdominal y la cadera, por lo que recibió asistencia médica.
Tras varios minutos de tratamiento, Djokovic regresó a la pista, cerró la manga y no pareció tener más dificultades para lograr el triunfo hasta el final del partido, que duró 1 hora y 46 minutos.
“He resbalado mucho en el partido y he sentido un poco de dolor en la pierna derecha, pero no es algo que me asuste”, dijo al final del encuentro.