(Video: Cortesía Deutsche Welle)

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El Bayern es campeón. Una vez más. Este año, sin embargo, antes que ningún otro equipo en la historia de la Bundesliga. Ya en la 27ª jornada, cuando aún quedan siete partidos por disputar, la escuadra entrenada por Pep Guardiola se asegura el campeonato. ¡Enhorabuena, sin pero que valga! El que recoge la charola de la Bundesliga, es porque se lo ha ganado. Si un equipo disputa 52 partidos de liga sin conocer la derrota, y tiene de largo la mejor defensa y el mejor ataque, no puede hacer otra cosa que ser campeón.

Guardiola ha hecho al Bayern aún mejor

A mediados de 2013, el entrenador estrella Pep Guardiola tomó los mandos del Bayern en un momento en el que, con la consecución del triplete Bundesliga, la Copa Alemana y Liga de Campeones, el club, simplemente, había logrado lo máximo posible. No eran pocos los que creían que, por esa razón, el español sólo podría salir perdiendo.

Pero Guardiola no sólo ha conseguido mantener el nivel del equipo, sino que ha logrado imponer su sello para hacerlo más juguetón. También esta temporada, el Bayern ha bailado en todas las bodas. En lo que se refiere a la Bundesliga, el objetivo está cumplido. La primera parte de la misión ha sido completada.

En estado de shock

Sin embargo, los bávaros no han podido evitar que esta temporada pase a los anales como la más aburrida de la historia de la Bundesliga. Aunque la culpa de ello la tienen el resto de los supuestos equipos punteros. Esta vez, ninguno de ellos merece ni siquiera el calificativo de “perseguidor del Bayern”. Da la impresión de que, prácticamente, están en estado de shock. Borussia Dortmund, Schalke 04 y Bayer Leverkusen han dado por perdido el título muy pronto. Sí, se supone que el Bayern debe ganar. Pero, ¿y el resto? El segundo y el tercer puesto son suficientes, parecen pensar, lo importante es el pase a la Liga de Campeones.

En lugar de demostrar espíritu deportivo y hacer frente a la abrumadora superioridad bávara, los rivales no han hecho nada más que quejarse de las desigualdades financieras. Al parecer, no le llegan a los muniqueses ni a la suela de los zapatos. Su agotadora autocompasión es casi tan aburrida como el dominio del Bayern.

Por otra parte, es claro que al referirse a la Bundesliga no se puede seguir hablando de la mejor liga del mundo. Ya sólo se puede hablar del equipo más fuerte del mundo.

(Fuente: Deutsche Welle )