Josep María Bartomeu, presidente del Barcelona (Foto: Wikimedia)

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La fiscalía anticorrupción solicitó dos años y tres meses de prisión para el presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu, y siete años para su antecesor, Sandro Rosell, por supuestos delitos fiscales en la contratación del atacante brasileño Neymar.

Según informa la agencia AFP, citando fuentes judiciales, el fiscal también ha pedido una multa de US$24,1 millones para el club catalán, imputa un delito fiscal a Bartomeu, así como otros dos delitos fiscales y uno societario a Rosell y tres delitos fiscales al Barcelona.

El fiscal ha presentado sus peticiones de penas después que, el 13 de marzo, el juez Pablo Ruz decidiera enviar a juicio a Bartomeu y Rosell, tras cerrar la instrucción por las supuestas irregularidades fiscales en el traspaso de Neymar.

El magistrado de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, consideró que el club, Rosell y Bartomeu pudieron incurrir en tres delitos contra la hacienda pública.

El juez Ruz cifró en US$90 millones las cantidades pagadas por el traspaso del atacante brasileño en 2013, lo que, según él, “eleva a más de 13 millones de euros el importe de la presunta defraudación” al fisco español.

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Según Ruz, los diferentes contratos utilizados en esta compleja operación “venían a encubrir u ocultar lo que en realidad constituían un mayor coste para el FCB” con el fin de “eludir o aminorar de manera subrepticia el pago ante la Hacienda Pública” de los impuestos correspondientes a la operación.