• Cultura
• Libros

Javier Salazar Calle explora un nuevo mundo en su libro “Sumalee. Historias de Trakaul”

Por: Maritza Luza Castillo
Javier Salazar Calle es un escritor madrileño Licenciado en Administración y Dirección de empresas que apuesta por la literatura con seriedad. Prueba de ello es su primera novela “Ndura. Hijo de la selva”, elegida mejor novela juvenil de 2014 por el periódico El Economista. Sus lectores lo definen como un escritor versátil, capaz de abordar cualquier temática con maestría. “Sumalee. Historias de Trakaul” es la prueba fehaciente de ello. David el protagonista de la obra nos transporta a Singapur y nos hace conocer los sabores dulces y ácidos de Tailandia.

1. ¿El nacimiento de ‘Sumalee. Historias de Trakaul’, qué nos trae bajo el brazo, aparte de escenificar la historia en Tailandia?

Es la historia de cómo las circunstancias de la vida pueden empujarnos hacia nuestros límites y ponerlos a prueba. Todos tenemos un concepto de nosotros mismos y de lo que seríamos capaces de hacer, pero ¿la realidad es lo que pensamos?. Casi siempre la respuesta es no. La mayoría de las personas, llevadas a situaciones límites, reconocen posteriormente que consiguieron cosas que nunca creyeron que fueran capaces de hacer o, todo lo contrario, que sus reacciones les decepcionaron y que esperaban mucho más de sí mismos.

2. ¿Cuál es la pretensión del relato cuando la espaciosa narrativa apunta a un joven aventurero cuyas ganas de reinventarse lo empuja a tierras desconocidas?

La pretensión inicial es entretener al lector, divertirle; pero, al mismo tiempo, hacerle reflexionar sobre lo que pensamos de nosotros mismos y de nuestra capacidad de adaptación a circunstancias inesperadas, ya sean buenas o malas. Nunca nos conocemos del todo, por mucho que así lo creamos.

3. ¿Esta secuencia de narraciones, un tanto apabullante y bizarra, sufrida por David, el protagonista de la historia, nos traslada a un escenario de emociones hondas donde la desesperanza alcanza un grado máximo, y el ser humano alza la cabeza por encima de la circunstancias?

Al final, es una montaña rusa de emociones. David, empieza la historia desesperado, abatido. Eso le lanza a intentar una nueva vida, que comienza con esperanza e ilusiones pero que se trunca de forma abrupta en sufrimiento y dolor. Es un hombre roto por las situaciones que le toca vivir que intenta reconstruirse interiormente y encontrar un nuevo yo donde se encuentre cómodo y que le permita sobrellevar su nueva vida. Lo interesante es que ese yo al que una persona puede llegar, no es el que habría elegido o el que hubiera querido, incluso ni siquiera el que creía posible. Tu mente se transforma acorde con las circunstancias convirtiéndote en otra persona de la que puede quedar mucho o nada de la anterior.

4. ¿Desde el punto de vista del autor por qué enfatizar en la crudeza, especialmente cuando la trama lleva al protagonista a la cárcel?. ¿El lector no desconoce los excesos penitenciarios? ¿Cuál es la lectura que el autor espera del lector haciendo hincapié en dichas secuencias?

La idea que tenía desde el principio era que el lector disfrutase con el protagonista y viviese con él los buenos momentos en Singapur y que sufriese y sintiese en su propia piel los peores en la cárcel de Bang Kwang, en Tailandia. No quería ocultar el sufrimiento que pasa allí ni darlo por sentado. El objetivo era sufrir con él y disfrutar con él. Sentirse el protagonista de la historia.

5. ¿Qué sintió cuando acabó de escribir Sumalee. Historias de Trakaul? ¿Qué autores citaría como referentes literarios?

La verdad es que terminé este libro muy satisfecho. Era un género que nunca había hecho antes, que tenía ganas de abordar, y el resultado me gustó.
En realidad, mis referentes literarios tienen mucho más que ver con mi primera novela, la premiada Ndura. Hijo de la selva, que con esta. Son grandes escritores de aventuras como Daniel Defoe, Julio Verne, Emilio Salgari, Tolkien… o escritores de ciencia ficción como Isaac Asimov. No tengo referentes relacionados con este estilo, lo que hizo el reto de escribirlo aún más interesante.

6. ¿Hacia qué público apunta, y cuál ha sido la demanda?

El público objetivo es aquel al que le gusten las buenas historias, con todos los cabos bien atados, bien construida y que generen sentimientos. Leyendo el libro podrá experimentar risas, llanto, amor, dolor, violencia… Y evolucionar junto con David, el protagonista.

La demanda ha sido buena, pero como siempre pasa con los escritores indies, va poco a poco y crece con el boca a boca y con las buenas críticas. Es verdad que ayuda el hecho de tener ya otros libros publicados, porque eso hace que la gente te conozca previamente y esté más dispuesta a comprar tu siguiente libro.

7. ¿Qué espera de la crítica literaria?

Que sea buena. Ja ja ja.

Al final, como escritor, lo que quieres es que tu libro guste a la gente. Esa es la mejor recompensa a los muchísimos meses de trabajo, documentación y escritura que hay detrás de cada libro. Esta semana me ha contactado una lectora contándome lo mucho que le ha sorprendido y gustado Sumalee. Historias de Trakaul y eso me ha hecho sentirme orgulloso de mí mismo. Me encantan las críticas, buenas o malas, pero que sean constructivas. Escribir un libro supone mucho esfuerzo y es algo que hay que respetar. Desde el respeto, admito cualquier comentario y, de hecho, los utilizo para intentar mejorar y escribir cada día mejor. Así que encantado de recibir críticas literarias.

8. Sus palabras finales para el lector

Bueno, no me queda más que recomendarle que lea algún libro mío y, sobre todo, que me hagan llegar sus comentarios. Tengo publicado una novela de aventuras (Ndura. Hijo de la selva), un drama (Sumalee. Historias de Trakaul) y un manual de LinkedIn (Usa LinkedIn como si fueras un experto). Puede ver toda la información en mi web www.javiersalazarcalle.com y encontrar allí todas las redes sociales en las que estoy para poder hablar conmigo. ¡Los espero!

Maritza Luza Castillo es una periodista y escritora peruana que ha colaborado con diversos medios y revistas literarias. Sus poemas han aparecido en antologías publicadas en España, Italia, Argentina, República Dominicana y otros.