Salud: ¿cómo conciliar tratamientos y cobertura universal en Latinoamérica?
La carga económica que supone para un paciente el pago de tratamientos para sus enfermedades en Latinoamérica es una barrera que frena los avances hacia una cobertura universal de salud, coincidieron hoy varios expertos reunidos en un foro en Sao Paulo.
“Aunque el sistema trate de promover la cobertura universal de salud, sigue habiendo mucho pago del bolsillo de los pacientes. Eso significa que las personas no están protegidas tanto como les gustaría”, explicó a Efe Lou Garrison Jr, profesor emérito del programa de política e investigación de resultados farmacéuticos de la Escuela de Farmacia de la Universidad de Washington.
Garrison Jr. fue además presidente de la Sociedad Internacional de Farmacoeconomía e Investigación de Resultados (ISPOR, por sus siglas en inglés).
Desde hoy y hasta mañana se lleva a cabo en Sao Paulo la sexta conferencia de Ispor, en su capítulo para Latinoamérica.
Se considera a esta instancia como el centro de reflexión de referencia sobre temas de salud, ya que provee a la comunidad de “herramientas científicas que ayuden a la gente a tomar mejores decisiones”.
Así se puede determinar, por ejemplo, “qué incluir en los paquetes de cobertura universal de salud, porque tenemos recursos limitados”, afirma Garrison, que cuenta en su haber más de 125 publicaciones especializadas.
Según explicó a Efe Jaime Caro, director científico de la empresa consultora Evidera y profesor adjunto de Epidemiología y Bioestadística de la Universidad McGill (Canadá), “sí hay cobertura universal en el papel, en los libros, pero en la realidad deja mucho que desear”.
En un almuerzo con periodistas promovido por la farmacéutica Roche, Caro, exmiembro del equipo de buenas prácticas de modelización de ISPOR, afirmó que el reto es darle a los sistemas de salud de América Latina una identidad propia.
“Me parece que es importante que Latinoamérica siga sus propios pasos y caminos, que no sea una copia de Canadá ni del Reino Unido. Sí hacen las cosas muy bien, pero es para su sistema y no necesariamente se aplica correctamente a Latinoamérica”, argumentó.
El experto en evaluación de tecnología sanitaria afirma también que es importante incorporar a los ciudadanos de la región a la toma de decisiones en salud.
Martina Garau, economista principal de la Oficina de Economía de la Salud (OHE por sus siglas en inglés), organización con sede en Londres, recomienda la incorporación de la evaluación de tecnologías de la salud (HTE, por sus siglas en inglés) que son herramientas valiosas para tomar decisiones acertadas y así canalizar recursos al sistema de salud.
“Las valoraciones de la tecnología de salud aseguran que con los recursos limitados que tienen los países se distribuirán de un modo eficiente”, aseguró la experta en una entrevista con Efe.
Un ejemplo de estas nuevas metodologías de evaluación es el análisis multicriterio para la toma de decisiones (MCDA, por sus siglas en inglés).
“La idea (con MCDA) es crear sistemas de tomas de decisiones transparentes para los observadores externos, que sean cuantificables, para que cuando se tomen las decisiones sepamos las razones detrás”, dice Garau.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha propuesto la cobertura universal de salud (CUS) como una estrategia para combatir la inequidad en el acceso a esta, particularmente en los países con bajos y medianos recursos económicos.
En la región unos 190 millones de personas no tienen acceso a cuidados de salud por motivos económicos, según cifras del Banco Mundial (BM).
En padecimientos tan relevantes como el cáncer, segunda causa de muerte en Latinoamérica, solo el 25% de un universo de 12 países (México, Costa Rica, Panamá, Perú, Ecuador, Paraguay, Brasil, Chile, Argentina, Uruguay, Colombia y Bolivia) brindan cobertura universal a sus ciudadanos.
Dichos resultados fueron parte de los hallazgos de un estudio de la Unidad de Inteligencia de The Economist llamado Control del Cáncer, acceso y desigualdad en América Latina presentado en julio pasado en Buenos Aires.
Fuente: EFE