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Asamblea Nacional de Rectores preocupada porque la nueva ley universitaria dispone su desaparición

El presidente de la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), Orlando Velásquez, expresó hoy su preocupación de que el proyecto de la ley universitaria, aprobado el lunes por la Comisión de Educación del Congreso, propone su desaparición.

Según Andina, Velásquez indicó que la asociación que encabeza sí ha trabajado en la mejora de la calidad de la enseñanza y en promover la investigación universitaria, por lo que estimó “injusto” que el dictamen aprobado pretenda su desactivación.

ENLACE: ¿Qué dice la nueva ley universitaria?

El presidente de la Comisión de Educación del Congreso, Daniel Mora, opinó que el “deplorable” nivel de educación universitaria en el país se debe en parte a la inacción de la ANR, a la que consideró como un “club de amigos”.

Velásquez insistió en que la creación de una superintendencia nacional de educación universitaria (Suneu), organismo que debe asegurar la calidad de la educación superior y que asumiría algunas facultades de la ANR, constituiría una “violación a la autonomía” universitaria e, incluso, “afectaría la libertad de pensamiento”.

De acuerdo al dictamen aprobado el lunes, la Suneu, que estará adscrita al Ministerio de Educación, estará compuesta por nueve personas: un representante de ese ministerio, uno del Ceplan, uno del Concytec, dos miembros designados por las universidades públicas y dos por las privadas, un miembro de los colegios profesionales y otro de los sectores empresariales.

Al respecto, el representante de los rectores argumentó que el nuevo organismo no garantiza un manejo adecuado del sistema universitario, porque este podría terminar “subyugado” por el gobierno de turno.

Velásquez opinó que el dictamen de la nueva ley universitaria “ha sido aprobado al estilo castrense”, en alusión al pasado militar de Mora. Añadió que se “confiscarán los bienes” de la ANR.

Finalmente, expresó su esperanza en que el dictamen no sea aprobado en el Pleno del Congreso y advirtió que los universitarios emprenderían movilizaciones en defensa de la “autonomía universitaria”.