Jalisco 'no baja la guardia' pese a degradación del huracán Patricia
El estado mexicano de Jalisco, por el que penetró el huracán Patricia , permanecía hoy en alerta, a pesar de que ahora parece menor la amenaza del ciclón, considerado el más potente de la historia reciente del país con rachas de viento de hasta 400 kilómetros por hora.
El fenómeno meteorológico, que después de llegar a las costas mexicanas con categoría cinco en la escala Saffir-Simpson (de cinco niveles) se degradó este sábado a tormenta tropical mientras se mueve por el centro del país, entró en México a las 18.00 hora local (23.00 GMT) del viernes.
El ojo del huracán tocó tierra en las inmediaciones de la localidad de Emiliano Zapata, en Jalisco, pero por ahora solamente se ha informado de la caída de árboles, lluvias muy intensas y fuerte oleaje, aunque en los vecinos estados de Colima y Michoacán, más al sur, se han registrado daños en casas y cortes del suministro eléctrico, además de haber vehículos varados.
Por ahora no ha habido víctimas, aunque sí miles de evacuados, muchos de ellos turistas que disfrutaban de sus vacaciones en la costa este mexicana.
En Puerto Vallarta, el balneario de Jalisco por el que se esperó hasta el último momento que entrara el huracán, miles de turistas y habitantes de zonas en riesgo fueron evacuados a albergues habilitados por el Gobierno del estado.
El resultado fue que la ciudad, normalmente bulliciosa y colorida, presentaba el viernes por la noche un aspecto fantasmal, con todos los comercios cerrados y escasa circulación de vehículos, situación que se repitió en el vecino estado de Nayarit, donde se encuentra la zona turística de Riviera Nayarit.
En Jalisco, al igual que en Colima y Nayarit, los más amenazados por la trayectoria del ciclón junto con Michoacán, se suspendieron las clases en los colegios y los puertos fueron cerrados a la navegación marítima.
Cihuatlán y Cabo Corrientes, en Jalisco, fueron los lugares más afectados por los fuertes vientos, pues las casas de la zona están hechas con materiales muy endebles, lo que provocó el desprendimiento de algunos techos.
En una rueda de prensa celebrada en las últimas horas en Puerto Vallarta, el gobernador del estado, Jorge Aristóteles Sandoval, pidió a la población “no bajar la guardia”, ya que “las ráfagas de viento siguen generando problemas”.
“En estos momentos, incluso, tenemos sin luz algunos municipios, parte de Cihuatlán, Cabo Corrientes. Quiero decirles que en cinco municipios tenemos 1.200 personas albergadas, desde Cihuatlán, Cuautitlán, La Huerta, Villa Purificación y Cabo Corrientes”, agregó.
Por ahora, en Puerto Vallarta no se han sentido los potentes vientos del huracán, aunque sí ha habido fuerte oleaje en las playas y copiosas lluvias que han anegado algunas calles.
Fuente: EFE