¿Qué hacer si mi hijo queda herido por un fuego artificial?
El prender fuegos artificiales es una tradición muy difundida y peligrosa en nuestro país, que se ve incrementada durante las fiestas de fin de año.
Aquí nuestra guía para tratar las consecuencias de un manejo irresponsable de estos objetos:
Quemaduras de primer grado
Se define una quemadura de primer grado a ellas que se limitan a la capa superficial de la piel.
1. Sostén el área quemada bajo agua fría para reducir su temperatura y limpiar la herida.
2. Seca suavemente el área afectada con una tela limpia.
3. Utiliza un anestésico tópico y/o una crema de aloe vera para humectar la zona afectada.
Quemadura de segundo grado
Este tipo de quemadura presenta daños a la capa media de la piel, incluyendo a las glándulas de sudor y las productoras de grasa. Puede tener como consecuencia pérdida de piel y la aparición de ampollas.
1. Apaga el fuego con agua o sofocándolo con una toalla o manta. Si la ropa de la persona está en llamas, haz que ruede en el suelo.
2. Quítale la ropa en contacto con la quemadura y sostén el área afectada en agua fría o compresas.
3. Pide con urgencia atención médica.
4. Seca las heridas y aplícale una crema antiséptica o un gel hidratante.
5. Envuelve la herida con una gasa o venda limpia.
6. Evite respirar, tocar o toser sobre la piel quemada para no infectar a las ampollas.
7. Lleva a la víctima a un hospital o centro médico cercano.
Quemaduras en tercer grado
Se define así a las quemaduras que se extienden a los tejidos más profundos. Estas pueden no doler debido a que afectaron los nervios de la persona.
1. Siga los mismos pasos que en los de la quemadura de segundo grado y procura conseguir ayuda médica lo más próximo posible.
2. Si la persona entra en shock, levántale los pies unos 30 centímetros y cúbrela con una manta (cuidando la zona afectada).
Pérdida de una extremidad
1. Detén el sangrado aplicándole presión directa con una tela limpia. Si se perdió un dedo de la mano, mantenla por encima del corazón para disminuir el flujo sanguíneo.
2. Encuentra la extremidad perdida inmediatamente, ponla en una bolsa y séllala. Bajo ninguna circunstancia pongas la extremidad en contacto directo con hielo u otro líquido, ya que puedes causarle daño a los tejidos y disminuir las posibilidades de que sea reimplantado.
3. Busca atención médica inmediata.