Cómo trabajar la respiración para reducir el estrés
La respiración es una de las funciones vitales más poderosas que tenemos y, algo muy importante, es una función que podemos controlar para sentirnos mejor.
Conocer y practicar distintas técnicas de respiración te permite conectar contigo mismo/a, disminuir el estrés y la ansiedad y encontrar un nuevo nivel de balance y armonía, en cuerpo y mente.
Aprender a respirar mejor tiene un impacto positivo en tu vida y en tu salud. Usualmente, la forma en que nos sentimos dicta la manera en la que respiramos. Por ello es importante, a través de la respiración consciente, invertir la figura y que sea nuestra respiración la que dicte la forma en que nos sentimos. Es decir, ser el piloto de nuestras emociones.
Mauricio Gil, coach certificado de respiración y meditación, hace hincapié en cómo, a pesar de que respiramos aproximadamente 25 mil respiraciones diarias, no nos han enseñado a utilizarla y a cuidarla. “Nuestra respiración tiene un gran impacto positivo a nivel físico, mental y emocional, y la tenemos a nuestra disposición cada segundo de nuestras vidas. Basta con que implementemos una disciplina de unos cuantos minutos diarios para empezar a sentir la diferencia en cómo nos sentimos”, afirma.
El especialista, que también es fundador del proyecto Amaru Inner Growth Alliance (organización que promueve actividades y retiros de bienestar y crecimiento interior), repasa algunos de los beneficios que tiene respirar de forma consciente: fortalece el sistema inmunológico, limpia toxinas del cuerpo, reduce la hipertensión y combate el insomnio.
“Quizá, a manera muy simplificada, uno de las influencias más positivas es que reduce considerablemente el stress y la ansiedad. Y si nos sentimos mejor, actuamos y pensamos mejor”, menciona. Él también añade la influencia que tiene respirar de una manera para ganar claridad en nuestros pensamientos y para entrar, de forma consciente, en estados de paz.
Como siempre hemos respirado de forma automática, quizá nunca nos hemos detenido a pensar cómo respiramos. “Y lo más probable es que no estemos respirando de una forma adecuada, lo que impacta en nuestra calidad de vida”. En sí, es muy simple: si respiras mejor, te sentirás mejor y tu vida será mejor. Toma una inhalación profunda y conecta con tu respiración.