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Por: César Valero
Cuando empecé a ver The OA esperaba encontrar extraterrestres – o algo por el estilo – y supongo que en parte se cumplió esa expectativa una vez que Prairie, la figura central de esta nueva serie de Netflix, contó su verdad. ¿Y cuál es esa verdad? Que su desaparición no se trató de un simple rapto, que a pesar de la intervención de la mano del hombre, había algo divino… o al menos esa es la idea detrás de esta ambiciosa y misteriosa producción que, a su modo, intenta seguir los pasos de Stranger Things, sin que esta haya sido la gran cosa a pesar de todo lo que se ha dicho.
De imágenes alucinantes pero un tanto infantiles en los momentos que intenta trascender, actuaciones discretas y de una narración accidentada, The OA es la serie que Netflix anunció a días de su estreno. Al igual que su trama, el drama de ciencia ficción aterrizó en el servicio de streaming en el absoluto secreto y por la algarabía que ha despertado en las redes sociales parece que la fórmula funcionó, sin importar si nadie entendía qué diablos significaba ‘OA’.
Prairie desapareció hace siete años hasta que un día fue vista dejándose caer de un puente. Sobrevivió y en cualquier otro lugar habría sido un sencillo final para una historia, pero solo se trató de un punto de referencia para The OA. Prairie tenía que contar dónde estuvo todo este tiempo, aunque no a cualquiera. Solo a cinco personas que se hicieron elegir de entre los ‘parias’ de la escuela local. Los diferentes. Los invisibles. Y Prairie justamente fue presentada como uno más de ellos. Quizá por eso aceptaron creer.
¿Y la historia? Tan alucinante como podrías imaginar dentro de los límites de lo verdadero, si es que consideras que el más allá realmente existe. Porque The OA es una historia sobre la muerte y sobre ángeles, sobre amigos y familia, sobre lealtades y fe y sobre una mujer que desapareció ciega y regresó viendo. Sobre milagros, en última instancia.
La narración de The OA logra su cometido casi a la perfección en su fase inicial. El relato de la familia reencontrada no tiene pierde. Todos quieren saber sobre Prairie, pero ella no quiere saber de nadie más que las personas a las que dejó atrás y rescatarlas es la misión de los ocho primeros episodios de la serie. El hilo narrativo, entre todas las revelaciones, conduce al paradero de los amigos perdidos de la protagonista, quien en ningún momento intenta ser una heroína. Solo quiere reunirse con ellos por el vínculo que han descubierto, aunque su pasividad puede resultar exasperante. Brit Marling como Prairie cumple una labor limpia, sobre todo en su ceguera, pero eso no quita que el retraimiento del personaje atasque por momentos el ritmo de la serie. Esa es la razón por la que los personajes de apoyo deben salvar la historia y ha sido un error de guión no explorar aún más el fondo de cada uno de estos compinches de ‘OA’. De todos modos, en conjunto logran una primera temporada atractiva, por momentos intrigante y sorprendente – ¿alguien más notó que cierto personaje se convirtió en la viva imagen de Jesucristo? -, con misterios bien administrados y un desenlace soso pero prometedor. Un cliffhanger siempre cae bien a pesar de su sabor agridulce.
The OA es una prueba que Netflix, a partir de Stranger Things, quiere apostar más fuerte por la ciencia ficción y por personajes que salgan del molde. Además, la serie tiene grandes ambiciones porque aborda una interrogante que sacude a la humanidad desde siempre: ¿qué hay después de la muerte? The OA tiene una teoría y cómo la desarrolla de cara a potenciales nuevas temporadas marcará el juicio que recibirá con el tiempo.
¿Por qué no les dije qué significa ‘OA’? Porque es parte del juego. Descúbranlo por sí mismos.
¿DÓNDE VER THE OA?
- Los 8 episodios de la temporada 1 de The OA ya están disponibles en Netflix.
