Síguenos en Facebook



FOTOS. Roberto Gómez Bolaños nació el 21 de febrero de 1929 en Ciudad de México. Hijo de una secretaria y de un ilustrador, nadie imaginó que el consentido de la familia marcaría una época en la historia de la televisión en América Latina.

Ingresó al mundo del entretenimiento como creativo publicitario y durante los años 50 se desempeñó exitosamente como guionista de películas y telenovelas. Se estrenó como actor, aunque en un pequeño papel, en la película Dos criados malcriados (1960) del dúo Viruta y Capulina.

Es por ese entonces que empieza a ser llamado Chespirito, su nombre profesional, por el director Agustín P. Delgado. ¿Por qué Chespirito? Porque esta palabra es un derivado del diminutivo de la pronunciación españolizada del nombre William Shakespeare, escritor con el que sus compañeros lo comparaban por su habilidad para escribir historia.

Chespirito

En 1968, Gómez Bolaños gana una media hora semanal en señal abierta para usarla a su antojo. Así empezó el programa Los supergenios de la mesa cuadrada. Poco después, en 1970, su espacio es extendido a una hora, ya siendo un programa propio llamado como él, Chespirito. Allí nace el Chapulín Colorado y, un año después, el Chavo. También, en distintas etapas, el Chómpiras, el Doctor Chapatín, Vicente Chambón y Chaparrón Bonaparte.

Además, para sacar adelante estos proyectos recurrió a un grupo de actores que también ganó fama internacional: Carlos Villagrán, Ramón Valdés, Florinda Meza –quien se convertiría en su esposa en 2004 tras una larga relación–, Rubén Aguirre, Édgar Vivar, Angelines Fernández, Raúl Padilla, Horacio Gómez Bolaños y María Antonieta de las Nieves.

Chespirito, con sus distintos sketches, permaneció al aire hasta 1995, viéndose en toda Hispanoamérica, Estados Unidos y España. Solo que su retiro de la televisión no significó el final de su carrera.

Roberto Gómez Bolaños continuó haciendo guiones para televisión y teatro, incluso llegó al Perú en 2008 con su comedia 11 y 12, aunque poco tiempo después empezaron sus problemas de salud. El 12 de noviembre de 2009 fue internado en Ciudad de México por una complicación de la próstata.

Pese a eso, Chespirito revolucionó internet al abrir, el 28 de mayo de 2011, su cuenta en Twitter. En menos de un día ya tenía 170.000 seguidores. A través de esta red social ha continuado por varios meses robando risas a sus fieles seguidores de toda una vida.

Su fallecimiento, el 28 de noviembre de 2014, a los 85 años, fue lamentado por miles de admiradores por toda América Latina.