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El actor austríaco Maximilian Schell, ganador del Óscar en 1962 por su papel en El juicio de Nuremberg, falleció hoy a los 83 años de edad por causas naturales en un hospital de la Innsbruck, en su país natal.
Schell debutó en Hollywood con The Young Lions, al lado de Marlon Brando, en 1958. En la película que le dio el premio de la Academia interpretó a un abogado que defiende a miembros del régimen nazi.
Su historia personal tiene un vínculo con el Gobierno de Adolf Hitler, pues su familia, de origen judío, huyó de Alemania en 1938. Schell actuó en más de 100 películas y también dirigió cine, documentales, teatro y ópera. Se había casado por última vez en agosto.
Schell nació en Viena el 8 de diciembre de 1930. Cuando los nazis anexaron Austria, la familia se trasladó a Suiza. Estudió en la Universidad de Basilea y tuvo varios papeles en teatro antes de conseguir sus primeros roles en el cine.