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Cuidado, alerta de Spoiler. Saigo no shipan ka!? Zettai shin no kyūkyoku no pawā! (¡¿Este es el juicio final?! El poder definitivo del Dios Absoluto) es el título del episodio 65 de Dragon Ball Super que se transmitió el domingo 6 de noviembre a través de Fuji TV en Japón*.
En el inicio del episodio 65 de Dragon Ball Super, Zamasu estrena su gran poder tras la fusión. Tanto Son Gokú como Vegeta se encuentran sorprendidos por el enorme ki de esta especie de dios supremo, y consiguen ganar tiempo para que Trunks ponga a salvo a Bulma y Mai.
Zamasu lanza un poderoso ataque contra los saiyajines, que también afecta a los humanos escondidos en los humanos en los edificios. Al salir de su refugio, los humanos se dan cuenta del increíble poder de Zamasu y algunos comienzan a perder la esperanza. Yayirobe espera que Gokú pueda derrotarlos.
Pese a que los Kaioshin expresan que el poder de Zamasu está fuera de su comprensión como dios, Gokú se muestra optimista de que solo tienen que ser más fuerte que él para derrotarlo. Sin embargo, sigue siendo inmortal. Por su parte, Vegeta, reconoce que no sabe cómo lo vencerán, pero no aceptarán una derrota.
De otro lado, Trunks, ha logrado llevar a Bulma y Mai a otro lado para que su madre siga trabajando en la máquina del tiempo. Sin embargo, él irá a luchar. Mai el entrega las semillas del ermitaño, aunque solo quedan dos.
Por su parte, Zamasu se alaba a sí mismo y confía en completar el plan Zero Humanos para comenzar un mundo perfecto. Vegeta se lanza al ataque, seguido de Gokú. Zamasu lanza un ataque ‘Luz de Absolución’, que manda lejos al príncipe saiyajin, y luego ataca a Gokú. Ambos pierden la transformación Super Saiyan Blue.
Con los saiyajines fuera de combate, Zamasu comienza a destruir la Tierra. Trunks logra salvar a una niña humana, mientras va en camino a dónde se encuentra su padre y Gokú.
En ese momento, Son Gokú y Vegeta se incorporan y le dicen a Zamasu que no se darán por vencido. El dios les responde que no saben cuándo deben rendirse. Los saiyajines nuevamente se transforman en Super Saiyan Blue y lanzan un nuevo ataque contra Zamasu. Y si bien en un momento, el dios parece sorprendido, logra detenerlos fácilmente.
Trunks llega cuando su padre está en el suelo, y eleva su poder por la ira, y lanza un ataque contra Zamasu, pero no es rival para el dios. Pese a ello, Trunks no se rinde y nuevamente lanza un Garlick Buster. Cuando su poder comienza a ceder, Vegeta se ha levantado y se une al ataque de su hijo, superando la fuerza de Zamasu.
Pese a ello, Zamasu ha sobrevivido, aunque se encuentra furioso por haber sido nuevamente humillado y lanza su poder contra Trunks, pero Vegeta se interpone. Cuando va a lanzar otro ataque contra Vegeta y Trunks, Son Gokú se incorpora y utiliza el Kame Hame Ha, al finalizar el episodio 65 de Dragon Ball Super.
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#DragonBallSuper: ¿qué pasará en el episodio 66? #SPOILER https://t.co/Y1PCU7lfj3 pic.twitter.com/lbLyl1PCZi
— La Prensa (@laprensaperu) 7 de noviembre de 2016
