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Cuidado, alerta de Spoiler. Goku VS Burakku! – Tozasareta mirai e no michi (¡Goku vs Black! El camino que nos conducirá al futuro_) es el título del episodio 50 de Dragon Ball Super que se transmitió el 3 de julio.
En el inicio del capítulo 50 de Dragon Ball Super, Black Gokú ha llegado al presente. Él parece recién darse cuenta que el anillo es el que le ha permitido llegar hasta allí, además de que reconoce a Gokú, Vegeta y a Bills el dios de la Destrucción.
Cuando Trunks está dispuesto a ir pelear, Vegeta lo detiene. En ese momento, Gokú aprovecha para ir él mismo a enfrentarse a Black Gokú, quien dice que es un honor enfrentarse a él con ese cuerpo.
De inmediato, Black lanza un poder que estrella a Gokú contra una montaña, pero el saiyajin no parece afectado, así que entra en modo Super Saiyan (Super Saiyajin) y ataca a su copia, sin causarle mayores problemas.
Black también eleva su poder y le pide a Gokú que le muestre más el poder de su raza guerrera y ambos se lanzan en una serie de ataques.
Wiss reconoce que Black es muy fuerte y Bills le parece extraño el Ki de Black.
En medio de la pelea, Black siente como una atracción por parte del agujero negro causado cuando viajó por el tiempo, y aumenta su poder nuevamente para enfrentar a Gokú tras recibir un golpe.
El golpe hace que la máquina del tiempo se caiga, y Trunks del Futuro expresa su preocupación llamando la atención de Black. Este se distrajo un momento y Gokú aprovechó de atacar.
En ese momento, el anillo de Black comenzó a brillar y la fuerza oscura lo hace regresar a su tiempo, aunque antes destruyó la máquina del tiempo.
En el futuro, Black Gokú se muestra débil tras la pelea y reconoce que no podrá regresar al pasado. Lo bueno para él es que Trunks tampoco podrá regresar a su tiempo y no habrá nadie que lo detenga.
Con la máquina del tiempo destruida, Trunks del Futuro siente impotente y que ha fracasado. Al principio parece que no hay forma de viajar al futuro, pero Bulma recuerda algo y parte a buscarlo. En tanto, Wiss les explica que el Black tiene el anillo de un Kaioshin. Bills aclara que no hay ningún kaioshin que se parezca a Son Gokú. Wiss insiste en que no se debe viajar a través del tiempo, mientras que Bills advierte que algo malo pasará.
Bulma regresa toda despeinada. Ella ha logrado encontrar lo que buscaba, una cápsula de una máquina del tiempo, tan solo que esa máquina del tiempo está en malas condiciones, pero ella piensa que podrá reconstruirla.
Al finalizar el episodio 50 de Dragon Ball Super se muestra el futuro de Trunks en donde se ve el cuerpo de Mai, quien mueve la mano.
