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En un fatídico día del 2013, el pequeño **Lukas Clark **de apenas 7 meses de nacido fue llevado a un hospital para un rescate de emergencia.
Lamentablemente, los médicos le dijeron a sus padres que no había mucho por hacer. Asimismo, les pidieron considerar la dolorosa decisión de donar los órganos de su pequeño
Armados de valor, los padres decidieron acceder al pedido, lo que permitió salvar la vida de hasta tres menores, siendo una de ellas la pequeña Jordan Drake, quien recibió el corazón del niño en un trasplante realizado en el Hospital de Niños de Phoenix, en Arizona (Estados Unidos).
Esther Gonzalez, madre de Jordan, hizo todo lo posible por contactarse con Heather Clark, madre del pequeño donante, a través de las redes sociales, siendo necesarios varios años para que llegaran a conocerse.
Finalmente, y luego de dos años, ambas familias decidieron darse un tiempo para reunirse en el establecimiento médico antes mencionado, dando pie a una conmovedora escena luego de que Clark decida escuchar, mediante un estetoscopio, el órgano de su fallecido hijo.
“Ese es tu bebé”, le dijo Gonzalez a Heather mientras ambas lloraban de la emoción.
Segundos después del emotivo momento, la pequeña Jordan Drake le obsequió a Clark un oso de peluche que reproducía el sonido del corazón de Lukas al presionar un botón.
“Es indescriptible”, dijo Gonzalez cuando se le preguntó sobre lo que le dejó el encuentro. “Tantas emociones diferentes en una: feliz, triste, deprimente, maravillosa, orgullosa. Si todas esas palabras pudieran ser moldeadas en una sola, eso es lo que sería”, agregó.
“Ahora somos familia, ahora somos amigos, nuestras familias son familias”, concluyó.
La grabación de la emocionante reunión fue publicada en YouTube, en donde acumula más de 600 mil reproducciones.
