Vista de un Samsung Galaxy Fold, el smartphone plegable de Samsung que fue presentado este mes de septiembre. (Foto: Jung Yeon-je / AFP)

Vista de un Samsung Galaxy Fold, el smartphone plegable de Samsung que fue presentado este mes de septiembre. (Foto: Jung Yeon-je / AFP)

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El mercado de ‘smartphones’ no pasa por su mejor momento. En el segundo trimestre de 2019 se vendió un 1,7% menos de celulares que durante el mismo periodo en 2018. Son cada vez más caros y menos innovadores. Así que preferimos gamas medias y bajas que ofrecen más por menos. ¿Son los teléfonos móviles plegables el golpe que el mercado necesita?

Mercado colapsado

Las estadísticas casi hablan por sí solas. Durante el segundo trimestre de 2019 se vendieron 367.908 unidades a nivel mundial, frente a las 374.330 en 2018. Y la tendencia no es pasajera. Según los datos de la consultora Gartner, las marcas que aumentan las ventas de celulares son aquellas que ofrecen por precios de gama baja las mismas prestaciones presentes en las gamas altas. Son ejemplos Huawei y Xiaomi. Apple vendió, durante el segundo trimestre de 2018, 33.715 iPhone frente a los 38.522 durante el mismo periodo de 2019.

La demanda de smartphones de gama alta ha disminuido a un ritmo mayor que la demanda de teléfonos inteligentes de gama media y baja”, según señala Anshul Gupta, director senior de investigación de Gartner.

Nueva revolución

Las marcas han tocado el techo de la innovación y las mejoras en el hardware y en el software no son suficientes para que el usuario se gaste, año tras año, más de 1.000 dólares por un nuevo terminal. Tocado ese techo, las empresas intentan vender sus celulares anunciando mejores cámaras a bombo y platillo.

“Para tratar de que los clientes renueven sus celulares, hemos visto a los fabricantes meter características premium —como cámaras multilentes frontales y traseras, pantallas sin bisel y baterías grandes de sus buques insignia— en modelos más baratos”, añade Gupta.

Es ejemplo la doble cámara trasera del nuevo iPhone 11 de Apple —hasta septiembre de 2019 solo presente en los iPhone premium más baratos—, principal perjudicada en las estadísticas.

Samsung es también consciente de que el mercado está colapsado. Consciente de ello quiso ser el autor de la nueva revolución que el mercado necesita presentando en abril de 2019 su nuevo Galaxy Fold, un terminal de pantalla plegable y sin biseles que hace las veces de celular y de tableta. A él se unieron Huawei y LG con sus Mate X y G8X ThinQ. Pero las prisas por hacer la revolución provocaron que los usuarios que se habían comprado el celular se quejasen de que la pantalla se rompía a los pocos días de uso. Samsung entonó el mea culpa.

Como señalan en Todo Noticias, los plegables emergen en un contexto de caídas en las ventas y como “un posible superhéroe que rescatará al negocio antes de que el declive sea aún más feroz”. Pero aparecieron demasiado pronto. Más que el fruto de la innovación, el Samsung Fold fue el fruto de la necesidad de mostrar un nuevo producto seductor que obligase al consumidor a volver a comprar.

El precio de la innovación

Al hecho de que el terminal plegable había salido del horno antes de tiempo se añade su precio, superior al coste de comprar los smartphones más potentes del mercado. El iPhone 11 Pro Max, con tres cámaras traseras y el más caro de todos los celulares de Apple, parte de los 1.099 dólares. El nuevo plegable de Samsung cuesta 2.000 dólares. ¿El Mate X de Huawei? 2.600 dólares.

Es el precio de una innovación creciente e inacabada. Una que deberá evolucionar más a fin de bajar precios y poder estar al alcance del más común de los mortales. Sin embargo, estos terminales sí tienen algo positivo: son una bocanada de aire fresco en un mercado colapsado por pantallas grandes y potentes cámaras.

Fuente: Sputnik.

Esta nota sobre smartphones fue actualizada el 18.09.2019 a las 08:07 am