Armas de guerra: ¿USA desplegará un arsenal nuevo y mejorado de misiles balísticos intercontinentales para el 2029?
El Pentágono podría contar con un arsenal de misiles balísticos intercontinentales * (ICBM, por sus siglas en inglés) nuevos y mejorados para el 2029. Estados Unidos (*USA) pretende abrir una nueva era en la tecnología de armas nucleares.
De acuerdo con un informe de Fox News, la Fuerza Aérea de Estados Unidos está trabajando en un prototipo de ICBM que planea lanzar a principios del próximo año con un mejor alcance, durabilidad, tecnología de focalización y letalidad, en relación a los misiles existentes.
Para tal fin, se lograron dos acuerdos de desarrollo a largo plazo con los conglomerados aeroespaciales y de defensa Northrop Grumman y Boeing. Después de una fase inicial de tres años, en 2020 entrará en vigor la fase de ingeniería y fabricación.
Modernización y mejora del arsenal estratégico
El plan es lograr la construcción de hasta 400 nuevas armas para modernizar los actualmente en despliegue misiles balísticos intercontinentales Minuteman-III de la Fuerza Aérea de USA y así mejorar la denominada Disuasión Estratégica Basada en Tierra (GBSD, por sus siglas en inglés).
Los misiles intercontinentales terrestres del Ejército estadounidense son antiguos. Los Minuteman III fueron lanzados por primera vez en la década de 1970, y aunque algunos componentes y subsistemas se han mejorado a lo largo de estas décadas, requerirán gradualmente un reemplazo.
En comparación con estos, los nuevos misiles dispondrán de tecnología mejorada en cuanto a propulsores, sistemas de vuelo y sistemas de comando y control. Se construirán teniendo en cuenta el mantenimiento y la sostenibilidad a largo plazo con el ánimo de que sirvan en perfectas condiciones hacia la década de 2070.
Disuasión estratégica: “nunca en duda y siempre temida”
El objetivo de este programa, tal y como se describe en un informe de 2018 del general de división Shaun Morris, es garantizar que la capacidad de “disuasión estratégica” estadounidense “nunca se ponga en duda y siempre sea temida”.
El miedo constituye la base de la disuasión estratégica, ya que el conocimiento de una retaliación segura impide que los enemigos potenciales contemplen un primer ataque, opina Morris. Según destaca, la amenaza de un ataque nuclear debe ser moderna, efectiva y sostenible.
Los esfuerzos por estar a la vanguardia también responden a la necesidad de contrarrestar el desarrollo tecnológico de potenciales adversarios y las tecnologías destinadas a eliminar, interceptar o destruir los ICBM.
Por ejemplo, se sabe que tanto China como Rusia están desarrollando láseres espaciales, armas hipersónicas y armamento avanzado contra satélites; dichas mejoras hacen a los ICBM más vulnerables y, por tanto, es probable la incorporación de un sistema de defensa, sensores y sistemas de advertencias dentro de la GBSD.
Fuente: RT