Despliegue de misiles S-300 rusos obligarán a Israel a reconsiderar antes de atacar Siria
El viceministro de Relaciones Exteriores de Siria, Faisal Mekdad, dijo hoy que la llegada a Siria del sistema S-300 de Rusia obligará a Israel a reconsiderar antes de atacar de nuevo a Siria.
En respuesta a una pregunta de Xinhua, Mekdad dijo en Damasco que el sistema de misiles ruso S-300, que llegará pronto a Siria, será utilizado sólo si Siria es atacada.
Las declaraciones se producen en el contexto de los recientes comentarios de funcionarios rusos en el sentido de que Moscú entregaría el sistema de misiles tierra-aire de largo alcance S-300 a Siria.
La decisión rusa se tomó días después de que cazas F-16 de Israel atacaron posiciones militares sirias en la provincia de Latakia. Israel fue acusado por Rusia de estar detrás del ataque al avión ruso.
“Israel, que se ha acostumbrado a realizar muchos ataques con diferentes pretextos, tendrá que recalcular y reconsiderar antes de atacar de nuevo”, dijo Mekdad.
“La agresión contra Siria es una agresión contra las fuerzas que combaten el terrorismo en Siria”, enfatizó.
Cuando Xinhua preguntó si Israel lanzaría más ataques contra Siria tras recibir el sistema S-300, Mekdad respondió: “Dejen que los israelíes lo intenten y nos defenderemos como lo hemos hecho antes”.
La semana pasada, un avión de reconocimiento ruso Ilyushin Il-20 fue derribado por error por la defensa antiaérea siria, la cual intentaba interceptar un ataque israelí con misiles contra una base siria en Latakia en el noroeste de Siria.
Los 15 soldados rusos a bordo del avión murieron.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo el domingo que los aviones F-16 de Israel usaron como escudo su avión de reconocimiento cuando atacaban Siria.
Fuente: Xinhua
DATOS CLAVES SOBRE LOS S-300
El S-300, cuya designación OTAN es SA-10, es un sistema transportable de lanzamiento de misiles rusos, superficie-aire y antibalísticos, que fueron fabricados por la Unión Soviética, con el objetivo de interceptar objetivos aéreos.
Los S-300 fueron desarrollados para neutralizar blancos enemigos como helicópteros, aviones de combate y misiles. Son transportables en camiones y funciona con otros vehículos equipos con radares y estaciones de mando.
Los S-300 entraron en servicio en 1978 y continúan operativos para las Fuerzas Armadas de Rusia, y varios países. Siguen en construcción, y se han realizado varias versiones hasta 2005. Su coste unitario hacia 2009 se calculaba en US$ 150 millones. Su sucesor es el S-400.
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