Portaaviones Kuznetsov en Siria. (Foto: EFE/Sana )

Portaaviones Kuznetsov en Siria. (Foto: EFE/Sana )

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La flotilla rusa encabezada por el portaaviones Almirante Kuznetsov que regresa de Siria por orden del presidente ruso, Vladimir Putin, no necesitará repostar en puertos europeos, dijo hoy una fuente militar.

“Va escoltada por un buque cisterna, por lo que los barcos pueden repostar en cualquier momento”, aseguró Viacheslav Popov, antiguo almirante de la Flota del Norte, a la agencia Interfax.

Recordó que cuando un buque atraca para avituallarse lo hace con el fin de ahorrar combustible, lo que no es el caso en esta ocasión, ya que su destino es su base de emplazamiento permanente en el puerto de Severomorsk (mar de Bárents).

“Ahora podrán llegar tranquilamente con su propio combustible“. destacó Popov, que cifró en unas dos semanas la travesía de regreso de la flotilla que incluye también al crucero nuclear Pedro el Grande, el mayor de su clase en el mundo.

La llegada a la zona en octubre pasado de la Armada rusa liderada por el vetusto Almirante Kuznetsov, que nunca había visto combate en su cuarto de siglo de vida, causó en su momento un gran revuelo debido a la negativa de los países de la OTAN a dejarle repostar en sus puertos.

Las autoridades españolas no se negaron a autorizar dicha escala, pero sí pidieron aclaraciones sobre si los buques participarían en acciones militares en Siria.

En el marco de una mesa redonda sobre el 40 aniversario del restablecimiento de las relaciones bilaterales, el viceministro de Exteriores ruso, Alexéi Meshkov, calificó ayer de “cómplices del Estado Islámico“ a los países que presionaron a España.

“Pero valoramos la postura sensata y sopesada de España, que nunca llegó a rechazar la entrada de los buques rusos”, subrayó.

El Ministerio de Defensa ruso explicó en su momento que el Almirante Kuznetsov nunca se planteó atracar en el puerto español, aunque sí barajó la escala de varios buques.

La escuadrilla de cazas MiG-29 y Su-33 del portaaviones ruso participó en la campaña antiterrorista rusa al atacar las posiciones de los yihadistas Estado Islámico (EI, ISIS o Daesh) y Frente de Conquista del Levante (antiguo Al Nusra, vinculado a Al Qaeda).

El pasado 6 de enero, Rusia comenzó la reducción de su presencia militar en Siria con la retirada de la flotilla del Mediterráneo oriental, que prosiguió ayer con el retorno de seis bombarderos.

El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó el repliegue de parte de sus tropas estacionadas en la zona al anunciar el pasado 29 de diciembre el acuerdo de alto el fuego entre el régimen de Bachar al Asad y la oposición armada siria.

Fuente: EFE