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CUIDADO, ALERTA DE SPOILER. Cuando los Tanner volvieron después de muchos años a la TV en Fuller House, a través de la plataforma de Netflix, bastante pronto fue revelado que una de las hijas de la familia no podía tener hijos y eso consternó a medio mundo. Sin embargo, en la primera parte de la tercera temporada, una luz se encendió y para la segunda parte, la luz se hizo más intensa a pesar de los miedos de la protagonista.

Stephanie Tanner (Jodie Sweetin) supuestamente no podía tener hijos, pero la tía Becky (Lori Loughlin) la llevó a la mejor especialista que conocía y poco después, la cantante de la familia descubrió que tenía óvulos que todavía podían funcionar, siempre y cuando consiguiera un vientre de alquiler para una fecundación in vitro.

Después de que Jimmy (Adam Hagenbuch) aceptara ser el padre de su hijo, al comienzo de la segunda parte de la tercera temporada de Fuller House, la pareja buscó a la candidata ideal para que lleve al niño o niña de ambos en su vientre – Stephanie y Jimmy consiguieron fecundar tres embriones –, pero las postulantes iniciales dejaron mucho que desear: una era fumadora, otra bebedora y las demás, simplemente impresentables.

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Stephanie deseaba más que nada ser mamá (Foto: Netflix)

Gia (Marla Sokoloff), la amiga de Stephanie, incluso se ofreció de voluntaria, pero cuando le dijeron que no podía beber nada durante el embarazo, simplemente desistió, dejando desconsolada a Stephanie, pero entonces D.J. (Candace Cameron Bure) apareció con la candidata ideal.

D.J. le explicó a su hermana que había visitado a su doctora con la intención de ofrecerse para el ‘trabajo’, pero fue descartada por los antecedentes del complicado alumbramiento de Tommy (Dashiell Messitt / Fox Messitt), su último hijo. Sin embargo, de la misma cita salió la candidata. ¿Quién? La persona que acompañó a D.J.: Kimmy Gibbler (Andrea Barber).

Kimmy cumplía con todos los requisitos para convertirse en el vientre de Stephanie y Jimmy y la pareja la aceptó, acercando ahora sí para siempre a la hermana y a la mejor amiga de D.J. Desde luego, Stephanie tuvo que superar su divertido rechazo a Kimmy – no siempre se llevaron bien –, pero después de un día juntas, incluso atadas por un cordón umbilical de fantasía, sellaron su naciente unión con un abrazo y reconociendo el amor que sienten la una por la otra. No obstante, todavía había algunos pasos más que dar.

Después de realizarse la fecundación in vitro, la familia en conjunto se vio obligada a esperar que haya funcionado, pero como Kimmy no experimentaba síntomas de embarazo, Stephanie estalló de preocupación. Incluso soñó que todo había sido en vano y por poco decae a pesar de las atenciones de Jimmy, pero para el final de temporada, volvió a sonreír junto a todos sus seres queridos.

Reunidos todos en el viejo club Smash, que los tíos Jesse (John Stamos) y Joey (Dave Coulier) compraron, para celebrar el 30 ‘padreversario’ de los patriarcas de la familia, Kimmy eliminó todos los temores de Stephanie y le anunció que oficialmente está embarazada. Será la otra mamá de su primer hijo y a Danny, quien también solía rechazar a la mayor de los Gibbler, no le quedó más que aceptarla como parte de su familia.

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Stephanie se convertirá en mamá gracias a Kimmy (Foto: Netflix)

¿Qué pasará ahora? Si Netflix renueva Fuller House para una cuarta temporada, un nuevo bebé se unirá a la familia. Y eso no es todo. Todos anunciaron que volverán a San Francisco.