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Como todos los años, uno de los momentos más esperados del Festival de Viña del Mar para los periodistas es cuando la reina del certamen cumple el tradicional ‘piscinazo’. Esta vez, la modelo chilena Kika Silva, se lució y llegó a reunión con una falda al más puro estilo aborigen que tapaba un sobrio bikini negro.
Ella debía realizar su acto el sábado pero fue pospuesto por la protesta de los pobladores de un asentamiento ilegal situado en uno de los cerros que rodean Viña del Mar. Ellos reclamaban mejores condiciones sanitarias al ayuntamiento en las afueras del Hotel O’Higgins.
Kika Silva, modelo y presentadora de televisión, apareció en la piscina del hotel veinte minutos más tarde de lo previsto junto a tres bailarines que realizaron una danza con esencia polinésica que sirvió de introducción.
Con un sugerente baile, la modelo del Canal 13 de televisión, se lanzó al agua ante la mirada de más de 200 camarógrafos y reporteros gráficos.
Kika Silva precedió a la modelo Nicole ‘Luli’ Moreno, la pasada reina del festival.
