El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, muy fastidiado por los aranceles impuestos por USA a los productos de aluminio y acero (EFE)

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, muy fastidiado por los aranceles impuestos por USA a los productos de aluminio y acero (EFE)

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Turquía ha solicitado hoy en la Organización Mundial del Comercio (OMC) que se celebren consultas con Estados Unidos en relación con los aranceles adicionales impuestos por este último país a los productos de acero y aluminio.

Turquía alega que tal medida restrictiva del comercio es incompatible con varias disposiciones del Acuerdo sobre Salvaguardias de la OMC y del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT) de 1994.

Tras mencionar que EEUU ha eximido de la medida a países “seleccionados”, Turquía indica en el escrito que presentó ante la OMC que el aumento de los aranceles “afecta desfavorablemente” a sus exportaciones de dichos productos hacia el mercado estadounidense.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, modificó los derechos a la entrada de determinados productos de acero procedentes de Turquía, aumentándolos del 25 % al 50 %, con efecto a partir del día 13.

Asimismo, anunció que elevaría los aranceles de ciertos productos de aluminio igualmente aplicables al país demandante, que pasarían del 10 % al 20 %.

“Las ventajas resultantes para Turquía del GATT se hallan anuladas y menoscabadas, y el cumplimiento de los objetivos del GATT de 1994 se halla comprometido”, sostiene este país en sus alegaciones.

La solicitud para que se celebren consultas en el seno de la OMC inicia formalmente una disputa en esta organización.

Las conversaciones bilaterales proporcionan a ambas partes la oportunidad de discutir durante 60 días el litigio y de hallar una solución mutuamente satisfactoria sin tener que dar otro paso en el conflicto.

Si las consultas no prosperan en ese plazo, Turquía podrá pedir a la OMC que se establezca un panel de resolución de disputas, algo que EEUU puede bloquear una única vez.

Ankara y Washington viven una fuerte tensión política a raíz de la detención de un pastor protestante estadounidense en Turquía hace dos años, que permanece en arresto domiciliario y cuya libertad Trump reclama.

En represalia, el Gobierno estadounidense ha impuesto sanciones a dos ministros turcos, además de las medidas comerciales.

EFE