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El novillero peruano Joaquín Galdós resultó corneado hoy de forma dramática por su primer novillo, tercero del festejo correspondiente a la feria de San Isidro, que se celebra en la plaza de toros de Las Ventas.
Galdós es el segundo novillero que queda fuera de combate esta tarde en Las Ventas, después de que el director de lidia, Martín Escudero, también sufriera un percance con el novillo que abrió plaza.
El joven espada limeño fue pillado por el utrero, de la ganadería de El Montecillo, que se metió por dentro en un lance de capote, volteando aparatosamente a Galdós, quien cayó de mala manera sobre el cuello en el albero de Las Ventas, donde quedó sin conocimiento.
Con anterioridad, Escudero había sufrido una aparatosa voltereta por parte del primer novillo y tuvo que ser atendido en la enfermería de la plaza de Las Ventas.
Las primeras noticias a pie de enfermería, señalaban que el madrileño Escudero no llevaba ninguna cornada, pero sí un fuerte traumatismo craneoencefálico, por el que los doctores estimaron oportuno derivarle de urgencia a un hospital.
El percance sobrevino ya en las postrimerías de la faena de muleta, cuando al ensayar el toreo al natural, el novillo, de El Montecillo, lo encunó entre los pitones, echándoselo a los lomos de forma aparatosa, y quedando el torero prácticamente inerte en el suelo.
Debido a estos dos percances, Francisco José Espada, que saludó una ovación al término de su primera faena, se ha quedado solo en el ruedo para hacerse cargo de los cuatro novillos restantes.
Fuente: EFE
