La basura arrojada en calles es uno de los principales contaminantes. Esto pone en riesgo la salud de la población. (Foto: Andina)

La basura arrojada en calles es uno de los principales contaminantes. Esto pone en riesgo la salud de la población. (Foto: Andina)

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A causa de las altas temperaturas, el índice de partículas contaminantes suspendidas en el aire aumenta durante los meses de verano. Además, el calor también está disparando la contaminación de ozono que puede agravar las enfermedades respiratorias y cardiopulmonares.

“El ozono, tiene dos maneras de formarse, uno positivo y otro negativo. El primero, es aquel que forma parte de la estratósfera, que protege de la radiación ultravioleta. El segundo se presenta a nivel de suelo y se forma por reacciones químicas entre otros contaminantes”, destacó Eric Concepción, experto en temas de aire y ex funcionario del Ministerio del Ambiente (MINAM).

El experto aseveró que en verano empeora la calidad del aire por el exceso de ozono procedente de gases tóxicos, como óxido de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles, que provienen de varias fuentes de contaminación, como los autos, la industria, la basura estancada en las calles, entre otros.

“Cuando estos componentes son expuestos a la luz de sol se convierten en ozono, un compuesto tóxico si se respira, el ingrediente principal del smog urbano y uno de los mayores causantes del asma sobre todo en los niños. El ozono también daña los cultivos y afecta a la visibilidad, creando una capa marrón que flota en el ambiente”, agregó.

Eric Concepción también recalcó que si el nivel de ozono supera los límites permisibles (180 microgramos por metro cúbico de aire) se considera perjudicial para la salud y es recomendable permanecer en lugares interiores y no realizar actividades prolongadas al aire libre en las zonas más contaminadas” informó el vocero.

El experto hizo un llamado para que personas y empresas se aboquen a buenas practicas ambientales. “Por ejemplo, las personas podrían no arrojar basura en horarios no establecidos para su recojo inmediato, no quemarla ya que es una de las principales fuentes de contaminación de hollín, tratar de desplazarse en bicicleta en tramos cortos, reducir el consumo de envases plásticos, evitar cocinar a leña o carbón, no consumir cigarrillos, entre otros”.

“Por el lado industrial, existen empresas que reciclan gran parte de sus productos y eso tiene que reconocerse y hacerse visible. Por ejemplo, Owens Illinois recicla todo el vidrio de las botellas, Industrias San Miguel hace lo mismo con los envases de plástico, ETNA recicla casi el 100% de las baterías usadas. Todo eso debe mostrarse y premiarse para que aliente a más empresas a invertir en buenas prácticas ambientales”, enfatizó.

Según la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos, el ozono puede disminuir la función pulmonar a largo plazo e inflamar las vías respiratorias. Los síntomas pueden incluir tos, irritación de garganta, ardor o malestar en el pecho o dificultad al respirar. La exposición a corto plazo también puede afectar temporalmente a los pulmones, el tracto respiratorio y los ojos, además de aumentar la sensibilidad a las alergias.