Dos visiones diferentes sobre el futuro de Escocia se enfrentarán mañana en las urnas. (Foto: stuant63/Flickr)

Dos visiones diferentes sobre el futuro de Escocia se enfrentarán mañana en las urnas. (Foto: stuant63/Flickr)

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Escocia es un enjambre de actividad, con la ansiedad y las emociones de sus habitantes llegando a nuevos altos. El país decidirá mañana, jueves 18, si se mantiene como parte del Reino Unido – como lo ha hecho durante los últimos 300 años – o si intenta probar su suerte como una nación independiente.

En este sentido, ambos bandos del referendo realizan ahora sus cierres de campaña. La distancia entre el “Sí” y el “No” es tan pequeña, que el proceso de mañana podría ir a cualquiera de los bandos.

BBC News señaló que tres encuestas diferentes, publicadas por el Daily Telegraph, The Scotsman y Daily Mail la tarde del martes dan una ventaja al “No” con 52% de los votos frente a los 48% del “Sí”, aunque sin contar a los indecisos. El proceso implicará a 4,3 millones de personas.

La situación visiblemente preocupó al Gobierno británico y tanto el primer ministro David Cameron como los líderes de los principales partidos viajaron en los últimos días a Escocia para promover la causa de la unión. En este sentido, prometieron que si el “No” gana, otorgarán mayores poderes de autogobierno a Escocia.

Esta promesa fue motivo de burla por parte de los independistas. En un mitin, el líder del grupo Yes Scotland (Sí Escocia), Dennis Canavan, calificó la proposición de ser un juramento que parece “escrito en la parte de atrás de una cajetilla de cigarrillos”.

“Solo hay una garantía para obtener más poderes para el Parlamento escocés y esa es votar por el ‘Sí’, así que extendamos ese mensaje, transmitamos nuestro mensaje a cada calle, cada ciudad, cada localidad, cada pueblo, cada comunidad, cada oficina, cada casa en Escocia”, afirmó.

Mientras tanto, la campaña del “No” se centró en la supuesta incertidumbre del futuro escocés en caso este país se independice e invocó a las personas que tengan dudas que no voten por el “Sí”.

“Lo que es claro al final de esta larga campaña, del lado nacionalista no hay ninguna certidumbre. Para cualquiera en Escocia que tiene alguna duda, que no haya ninguna – tienes que decir ‘No”, afirmó el líder de Better Together (Mejor juntos), Alistair Darling. El político apareció en un mitin junto al exprimer ministro británico Gordon Brown.

Preocupación en otros países

La posible independencia de Escocia ha traído esperanza a regiones con tendencia independentista y preocupación a los países donde se ubican. Es así que cientos de miles de personas salieron la semana a las calles de Barcelona la semana pasada para pedir la independencia de Cataluña. En la protesta se vieron ondeando, junto a las banderas catalanas, unas de Escocia.

Políticos en la isla de Okinawa, en Japón, también indicaron que están estudiando es caso escocés para su posible independencia al ver “muchos puntos en común”.

Otras regiones que han expresado su deseo de separarse de sus naciones son el País Vasco (España), Flandes (Bélgica), Sur del Tirol (Italia) y Córcega (Francia).