(Foto: SpeakerBoehner / Flickr)
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El Congreso de los Estados Unidos y la Casa Blanca disponen de menos de 10 días para ponerse de acuerdo sobre el presupuesto de EEUU para el próximo año fiscal. De no lograrlo, el Gobierno federal se quedaría sin dinero y gran parte de sus funciones se verían paralizadas el 1 de octubre.
El viernes, la Cámara de Representantes propuso un proyecto de ley de presupuesto temporal a costa de negarle fondos a la reforma de salud instituida por el Gobierno, conocida coloquialmente como ‘Obamacare’. Esta legislación no tiene ninguna posibilidad de ser aprobada en el Senado, bajo control de los demócratas.
Como resultado, las agencias gubernamentales ya recibieron instrucciones de que se preparen para la eventualidad de un cierre parcial en virtud del cual solo los empleados considerados esenciales irían a trabajar, aunque por ley algunas dependencias podrían operar con trabajadores sujetos a no recibir momentáneamente su salario.
De acuerdo con la Oficina de Administración y Presupuesto del gobierno, los ‘intocables’ serían los necesarios para preservar la seguridad nacional, responsabilizarse de las relaciones internacionales, y quienes se ocupan de garantizar el pago de beneficios esenciales y la protección de propiedades.
Esta no es la primera vez que EEUU se ve expuesto a la misma coyuntura: entre 1977 y 1980, el Gobierno se vio obligado a cerrar temporalmente seis veces, y, entre 1981 y 1996, otras nueve.
Las parálisis ocurridas en los 70 y los 80 duraron entre tres y diecisiete días. La más reciente, entre diciembre de 1995 y enero de 1996, se prolongó durante 21. Algunos temen que esta vez podría ser peor, ya que en anteriores ocasiones sí aprobaron varias asignaciones parciales. En cambio, esta vez no se promulgó ninguna ley.(Voz de América)
