Barack Obama a críticos de su visita a Texas: "No estoy interesado en fotos"

Tras su visita a Texas para analizar el problema de la migración de niños, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, fue criticado por los republicanos por no haber acudido a la zona de la frontera con México.

En respuesta, el mandatario aclaró que “no hay nada que esté ocurriendo en la frontera de lo que yo no esté íntimamente al tanto”. En su viaje, el líder de la Casa Blanca se reunió con el gobernador del estado fronterizo, el republicano Rick Perry, quien lo invitó a recorrer Río Grande, el paso que utilizan los indocumentados.

Para Obama la crisis es a largo plazo y se puede resolver si el Congreso aprueba el aumento de US$3.700 del presupuesto para la frontera y la construcción de más locales para acoger a los menores ilegales. En los últimos 10 meses han ingresado 52.000 niños sin mayores.

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“El Congreso ha dicho que quieren una solución al problema. La solicitud de fondos les ofrece la capacidad de votar de inmediato para conseguirla (…) Esto no es un teatro. No estoy interesado en oportunidades de foto, sino en resolver un problema”, añadió.

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, cuestionó la solicitud de fondos de Obama porque no incorpora el despliegue de la Guardia Nacional a la frontera. “Si los congresistas de Texas necesitan un compromiso de que vamos a enviar pronto a la Guardia Nacional para aprobar los nuevos fondos, estoy dispuesto a considerarlo”, agregó.

EL jefe del Estado está convencido de que Washington tiene que enviar recursos a Honduras, Guatemala y El Salvador “de una forma más sostenida y de alto nivel, como lo estamos haciendo ahora, para que los padres no crean que es más seguro para sus hijos enviarlos a miles de kilómetros para que no les hagan daño”.